Caracas, 9 ene (EFE).- Venezuela rindió honores y acogió este martes en el Panteón Nacional los restos del general Domingo Antonio Sifontes, un soldado que en el siglo XIX, de acuerdo con el Ejecutivo, expulsó a tropas inglesas de la Guayana Esequiba, un territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados en disputa con Guyana desde la época colonial.
El acto estuvo encabezado por el presidente Nicolás Maduro, quien aseguró que ofrecer esta distinción al militar es «la mayor justicia» con la que se puede «reivindicar a un hombre bueno que defendió la patria por encima de cualquier circunstancia, dificultad o dolor, que amó su tierra, que amó a Venezuela y demostró su amor en la batalla».
A propósito de conmemorarse hoy 112 años de la muerte de Sifontes, el mandatario le otorgó la Orden Libertadores de Venezuela y enalteció su «ejemplo» en la lucha contra tropas británicas por la defensa del Esequibo que, aseguró, «más temprano que tarde» será de Venezuela.
«Ese es el ejemplo de los valores que nosotros tenemos que llevar hasta al último soldado de la última unidad militar (…) Siempre tienen que estar prestos para seguir el ejemplo del general Sifontes y defender la tierra venezolana, la soberanía del país, de cualquier imperio o de cualquier oligarquía traidora», destacó.
El traslado del héroe al mausoleo comenzó el sábado en una «caravana» que llegó este lunes a Caracas tras partir del estado Bolívar (sur), donde se encontraban sus restos.
Durante el recorrido, el militar fue homenajeado en distintos actos celebrados en poblaciones de los estados Anzoátegui y Miranda, por donde transitó la «caravana» antes de llegar a la capital venezolana.
En Caracas, los restos del soldado fueron llevados a la Academia Militar y, posteriormente, a la Asamblea Nacional (AN/Parlamento) donde se aprobó, por unanimidad, un proyecto de acuerdo mediante el cual se conceden los honores del Panteón Nacional a este general.
De acuerdo con la versión oficial, Sifontes es reconocido por la gesta que llevó a cabo un 2 de enero de 1895, cuando impidió que tropas británicas tomaran las zonas de El Callao, Upata, Tumeremo y El Dorado, ricas en minerales.