Los habitantes de la ciudad de Valera, en el estado Trujillo, deben
recorrer varias carnicerías para poder conseguir carne o pollo, a
precio regulado. Si llegan a conseguirla, deben hacer largas colas
para poder adquirirlo.
Hasta hace tres semanas, estos alimentos, de origen animal, habían
desaparecido de las neveras de los comerciantes, pero hace una semana,
volvieron a verse, aunque en pocas cantidades.
En una carnicería del centro de la ciudad, especificamente en la calle
8, el propietario, manifestó que sus proveedores le despacharon carne
de res y otros cortes, los cuales vendió al precio estipulado en
gaceta. No obstante, algunos cortes, debió venderlos desligados de la
regulación, pues no llegaron al precio actual.
Sigue la escasez
En otros comercios de la región, los vendedores se mantienen con la
venta de queso y charcutería. Son pocos los proveedores, que despachan
carne y solamente les llevan patas de pollo y mollejas.
En las polleras, el escenario es similar, cuando llega producto, los
usuarios hacen cola hasta, que se agote la mercancía. Por otro lado,
los usuarios denuncian, que en ocasiones, algunos comercios lejos del
casco central (principalmente en otros municipios) se aprovechan de la
escasez y venden carne o pollo a precios exorbitantes.
María Gabriela Danieri