Por: Marlene Briceño
“ La ciudad de Valera, nuestra ciudad, la ciudad de todos, la ciudad de más de 200 años de haber sido elevada como parroquia Eclesiástica, se muestra propicia para destacar aspectos positivos de importancia que tienen tanto la urbe como sus habitantes. En pocas palabras, Valera puede presumir con orgullo que tiene con qué…”
Así describía el buen amigo Elvins González, lo que los Valeranos, después de 204 años, debemos sentir por esta tierra amplia, cuyo norte siempre fue la convivencia pacífica y el desarrollo económico en oportunidades para todos.
Una vez más marcando pauta en la historia, Valera celebra un año más de su fundación; el afecto que sentimos por este suelo nos llevó a revisar, leer , tener presente su pasado, hurgar en el origen de nuestra ciudad, el camino recorrido desde su nacimiento, del esfuerzo realizado por los que se entregaron a forjar su progreso y tener presente para sacar a la luz, los valores morales y cívicos con que cuenta para siempre mantenerlos vivos, resaltando esas personas que prestaron eminentes servicios o que fueron protagonistas de sucesos dignos de recordar. Los constructores de un sueño, que a pesar de las dificultades siempre ha avanzado en logros y éxitos.
Este afecto que sentimos nos llevó a incursionar en su pasado y creatividad, enriquecernos con su historia al recordar a estos dignos personajes, con los cuales podemos lograr despertar el interés de nuestros coterráneos para traer a la memoria de esa Valera perdida en las brumas, los recuerdos y las verdades que el tiempo nos ha otorgado, reconstruyendo, de esa manera, el reconocimiento a su historia y la alegría de un mejor porvenir.
Valera siempre fue una referencia nacional, donde se dieron procesos de desarrollo económico, artístico y cultural de gran transcendencia. Nombres de ilustres valeranos como Adriano González León, el chino Valera Mora, Alberto La Riva Vale, Guillermo Montilla, Ana Enriqueta Terán en literatura, cuya magia tejió siempre una red de amores y visualizaciones a la tierra de Mercedes Díaz-
En el glorioso pentagrama musical hemos contado con un sin número de agrupaciones musicales de gran calidad artística, con compositores consagrados, familias de alto vuelo musical como los Abreu, los Albornoz, Arias, Ocanto, recordamos con nostalgia nuestra banda musical bolívar. Así como nos sentiremos siempre orgullosos del gran José Antonio Abreu máximo representante del universo musical venezolano, premio príncipe de Asturia.
Nuestra ciudad tuvo presencia nacional en los grandes festivales y encuentros de teatro, con la gran maestra valerana Pilar Romero quien formo y dirigió el grupo de teatro de la universidad Rafael Urdaneta hoy UVM, cofundadora y directora del teatro nacional juvenil Núcleo Valera, quienes participaron en festivales nacionales e internacionales representando a Venezuela.
En el movimiento dancístico pleno de satisfacción podemos afirmar que Valera posee un gran número de agrupaciones que por su talento y entrega artística han recibido el reconocimiento nacional nos han representado en festivales de danza recibiendo elogios y premios por su gran calidad.
En nuestra ciudad se ha realizado congreso de relevancia nacionales e internacional. Los gremios que hacen vida activa en Valera médicos, educadores, periodistas y diferentes instituciones universitarias han resaltado el desarrollo de Valera como un reconocimiento al intelecto nacional. Hechos marcados por la dinámica histórica de siempre, donde acontecimientos políticos, comunicacionales y universitarios daban apertura a un devenir permanente de acción humana diaria.
Como dice nuestro querido Raúl Díaz Castañeda “Debemos atrevernos a soñar”, nos corresponde a nosotros seguir luchando para convertir los sueños de Valera en realidad. Una ciudad que fue motor del desarrollo andino, confluencia de la economía de los estados andinos merece recuperar la senda del progreso, en libertad de oportunidades
Valera cumple 204 años, vamos a unir esfuerzos y participar desde cada uno de nuestros espacios para devolverle a nuestra urbe su prestancia y señoría. Valera puede volver a ser la ciudad dinámica y progresista que un día fue. Aquella de los grandes eventos, del reconocimiento nacional, del comercio formal que generaba empleo y grandes desarrollos, la Valera de los poetas, del ateneo, la ciudad que luchaba con sus periódicos que producían grandes debates, Valera merece más, empeñemos la voluntad en eso, es el mejor regalo a tantas vidas que Valera ha dado.
Valera, 14 de febrero 2024
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