El municipio Valera, en el estado Trujillo, tienen de 4 a 15 días sin agua. De acuerdo a fuentes extraoficiales, esta falla se debe a que tres de las cinco bombas, de la planta de tratamiento de El Cumbe, se encuentran dañadas. Desperfecto mecánico que se desprende de las constantes fluctuaciones en la energía eléctrica.
Hasta los momentos, la comunidad más afectada es la Urbanización de Santa Cruz, donde tienen 15 días con las tuberías secas. Magaly Dávila explicó que en la etapa uno, unas 30 familias han tenido que recoger agua de lluvia para poder continuar con sus rutinas.
Han pedido ayuda a Hidroandes y a otras instituciones, pero no tienen camiones cisternas para llevarles agua. En consecuencia, han tenido que ir a otros sectores o comprar a surtidores privados.
El llenado de un tanque puede costar hasta 200 Bs S y 45 Bs S un botellón de agua potable. Precios que pocos se pueden costear. Esperan una respuesta de las autoridades.
Con poca fuerza
Dos bombas, de El Cumbe, surten agua hacia la urbanización La Beatriz y Las Acacias, pero con poca fuerza. Las autoridades trabajan en la reparación del sistema. No obstante, aún no saben cuándo pueda estar operativo en su totalidad.
Mientras vuelve la normalidad, sectores de las parroquias San Luis, Mercedes Días y Juan Ignacio Montilla, padecen la escasez del vital líquido.
Camiones cisternas hacen cola para llenar en la estación de Santo Domingo para surtir a instituciones públicas o comunidades, que pagan por el servicio. Pocos prestan colaboración a sectores como Santa Cruz por la inseguridad.