Valera en la vigilia y en el sueño. Raúl Díaz Castañeda / Por Pedro Frailán

Sentido de Historia

 

 

 

 

“Lorenzo miraba el horizonte enrojecido (…) Nada le preocupaba tanto, como la línea en el horizonte, porque seguramente llegarían al fin del mundo y caerían con todo y tren en el abismo.” (2006:9). De esta manera inicia, Elena Poniatowska, su novela “La Piel del Cielo”, ganadora del premio Alfaguara 2001. Es el principio de un viaje incierto para dos niños Lorenzo y Florencia.

Era el año de 1958, cuando un joven recién graduado de médico emprende un viaje, no por su propia decisión, sino  por una disposición burocrática. Llegar a un lugar desconocido que ni siquiera existía en sus sueños. Así narra el propio Dr. Díaz Castañeda,  cuando llegaba a Valera en automóvil, agobiado por años y kilómetros, el joven médico, más asustado que alegre.

Entró por la ciudad que de repente parecía una postal, en donde los solares y pedazos de hacienda, le daban pasos a su crecimiento. Quién iba a pensar que aquel joven lleno de incertidumbres, se convertiría en una referencia obligada de la hoy urbe de Doña Mercedes Díaz.  Porque es un trujillano de corazón, como lo consagró Don Francisco Omar Araujo.

Valera en la Vigilia y en el Sueño, es el discurso del Dr. Raúl, cuando la ciudad cumplió 160 años. Es una síntesis de historia local, no es un resumen, sino un discurso de literatura breve, que es bien difícil  de construir, como lo hacen los grandes. Me hizo recordar la capacidad de síntesis de nuestro Arturo Uslar Pietri.

Grandioso la estética del discurso al ir surgiendo la magia de la palabra con la historia. Destaca los iconos de identidad, de la arquitectura, de la geografía, de la evolución de las instituciones, los grandes personajes, también los menos destacados, pero que no dejan ser grandes porque son la ciudad. Es el planteamiento de Unamuno en la intrahistoria, darle la voz de protagonismo.

Describe la Valera de las calles empedradas, del punto de encuentro, la Plaza Bolívar, el mercado viejo, Radio Valera y Turismo, el Diario El Tiempo, Los Andes, el desaparecido  semanario, El Tubazo, que  dice: “Incordiador y malasangroso, cuyo tremendismo y malacrianza no son otra cosa que expresión de un amor distinto por Valera, pero amor también». 

Una curiosidad resaltada es la de Manuel Sánchez Castaño. Es la primera persona que hace el primer viaje en automóvil de Trujillo a Caracas, en 1920. Duró cincos días  con un costo de doscientos bolívares. Otra la de Agueda González. Se dice que construyó la primera casa en el valle en 1810.  Un texto para leer y compartir acompañado con las anécdotas.

 

Bibliografía. DÍAZ CASTAÑEDA, Raúl. Valera en la Vigilia y en el Sueño. Ediciones Multicolor. Valera – Diciembre 1980.

 

 

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