Las morrales pueden significar dolores de espalda para los niños en edad escolar, pero un cirujano ortopédico ofrece a los padres y a los niños consejos para mantener el dolor a raya, publica Medline Plus.
«Los padres deben inspeccionar la mochila de sus hijos de vez en cuando», afirmó el Dr. Joshua Hyman, del Hospital Pediátrico Morgan Stanley de Nueva York-Presbiteriano, en la ciudad de Nueva York.
Los niños «con frecuencia cargan más de lo que deberían, con zapatos adicionales, juguetes, dispositivos electrónicos y otros artículos innecesarios», explicó en un comunicado de prensa de la universidad.
Algunos consejos
Cuidado con el peso: Según Hyman, los bolsos no deben pesar más que el 15 por ciento del peso corporal de un niño. Eso equivale a 7 libras (unos 3 kilos) para un niño de 50 libras (unos 23 kilos).
Aligere la carga: Si cree que su hijo carga demasiados libros, hable con el maestro para ver si puede dejar alguno en la escuela. Si no, un bolso con ruedas podría ser una opción.
Dos correas son mejor que una: Anime a su hijo a usar las correas de ambos hombros (no en uno solo) para que el peso se distribuya equitativamente.
El tamaño importa: Elija una bolso del tamaño adecuado que no sea más ancha ni más larga que el torso de su hijo, y asegúrese de que no cuelgue más de 4 pulgadas (10 centímetros) por debajo de la cintura del niño. Un morral que cuelga muy bajo podría obligar al niño a inclinarse hacia adelante al caminar.
Mientras más acolchada, mejor: Busque un bolso con correas anchas y acolchadas para evitar que se claven en los hombros del niño. También busque una con una parte trasera acolchada. Esto puede reducir el riesgo de que un objeto punzante dentro de la mochila le haga daño a su hijo.