Madrid, 28 ene (EFE).- La ruta hacia la neutralidad de emisiones a la atmósfera para 2050 con miras a reducir el calentamiento global se ha visto ralentizada con la guerra en Ucrania, en un periodo en el que entre 3.300 y 3.600 millones de personas son altamente vulnerables a los impactos del cambio climático, según Naciones Unidas.
Para crear conciencia sobre el calentamiento de la tierra y adoptar medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero causantes del ascenso de la temperatura, cada 28 de enero la ONU conmemora el Día Mundial de la Acción frente al Calentamiento Terrestre, denominado también como el Día Mundial por la Reducción de las Emisiones de CO2.
A pesar de que durante la pandemia, con el parón en tráfico de vehículos se produjo una reducción de las emisiones de CO2, las mismas han vuelto a aumentar y volver a la «normalidad», según expertos consultados por EFE.
AUMENTAR ESFUERZOS
Los científicos del sexto Informe de Evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de Naciones Unidas, la colombiana Paola Arias Gómez y el argentino Juan Rivera, han coincidido en la necesidad de incrementar los esfuerzos para la reducción de emisiones.
“Si no se revierte la situación, en veinte años sobrepasaríamos los 1,5 grados centígrados, que desencadenaría aumentos del nivel del mar, lluvias y sequías más extremas, olas de calor y extremos de temperatura”.
Arias destaca la necesidad de «incrementar las inversiones en adaptación, porque se ha invertido menos en adaptación que en mitigación”, y eliminar los combustibles fósiles, a pesar de los «intereses petrolíferos» en países dependientes de esos ingresos como Colombia.
Por su parte, Rivera considera importante «proteger a las pequeñas islas del Pacífico, que se verán severamente afectadas por los desastres naturales por la subida del nivel del mar y dejarán migraciones masivas».
Además, recalca la necesidad de imponer impuestos a empresas más contaminantes y ampliar las ayudas para una transición energética a las energías renovables, pues «necesitamos que se generen mecanismos para acelerar la reducción en las emisiones de gases de efecto invernadero”, según el experto.
ALGUNAS SOLUCIONES
El portavoz de cambio climático de Greenpeace España, Pedro Zorrilla, señala que «no sólo no expulsamos menos gases o lo hacemos a una velocidad más lenta, sino que superamos anualmente el récord de emisiones».
Aunque algunas regiones, entre ellas Europa y Estados Unidos, «las han reducido un poco, países como India o China las están aumentando y cada tramo de CO2 que echamos a la atmósfera, cuenta».
No obstante, a pesar de que es el que más emisiones registra, comenta que «China es el país que más invierte en energías renovables, pero sus nuevas plantas de carbón» hacen que sus emisiones «sigan en auge».
Para revertir que los gases sigan dañando el planeta señala dos vías: «A través de las COP (Convenciones de Cambio Climático)», con las que llegar a acuerdos internacionales, y «que los países más ricos financien proyectos de energías renovables en aquellos que están en vías de desarrollo».
Donde se están poniendo en marcha las «ciudades de los 15 minutos», para integrar las oficinas, el ocio, las viviendas y las tiendas en un perímetro próximo, el objetivo es poder recorrer todos esos sitios andando y no utilizar el vehículo.
Otras medidas para reducir las emisiones están en el transporte, como fomentar el «uso del ferrocarril», o «aumentar los impuestos en las actividades que más contaminan y mejorar el aislamiento de los edificios», según Zorilla.