Yanara Vivas SNTP 6961 /CNP 16770
A eso de las 7:45 de la mañana de este sábado 29 de abril, una jovencita identificada como Raquel Nava Ortega, de 18 años de edad, se convirtió en la cuarta persona en quitarse la vida en lo que va del mes de abril, saltando desde el viaducto Miranda, ubicado entre la avenida 2 Lora y la avenida Las Américas, a la altura del Mercado Principal, en la ciudad de Mérida.
En la recuperación del cuerpo participaron funcionarios de los Bomberos Forestales de Inparques, Bomberos de Mérida y de la Brigada de Rescate Santa Elena, quienes cumplieron con el protocolo de entrega a efectivos adscritos al Cicpc.
Como se recordará, desde el pasado 22 de abril, las autoridades regionales y municipales, diferentes organismos de seguridad, rescate y prevención, además de voluntarios, han desarrollado una campaña de concientización, así como vigilias y cadenas de oración donde han participado la Iglesia Católica y Evangélica de manera conjunta, con el fin de frenar los suicidios en la entidad, manteniéndose incluso funcionarios en el viaducto.
Lamentablemente algunas instituciones han señalado a los medios, quienes tienen el deber de informar, como responsables de propiciar el aumento de suicidios en la entidad, dejando de lado las verdaderas causas psicológicas y entorno, de quienes toman la terrible decisión de terminar con sus vidas.
Mientras se logran solucionar los problemas personales de los ciudadanos vulnerables, la instalación de mallas protectoras o estructuras similares a las instaladas en el viaducto Campo Elías, también en Mérida, para evitar situaciones similares en su momento, podrían ser una medida paliativa y preventiva.