Madrid, 11 dic (EFE).- El documental ‘Chaplin, espíritu gitano’ muestra imágenes inéditas de Charles Chaplin y revela un aspecto de él poco conocido: su origen gitano. Carmen Chaplin, su nieta, lo ha explorado en una película que es un homenaje a un «rebelde» y que supone una reconciliación familiar.
El trabajo, premiado en el último Festival de San Sebastián, fue financiado en España, Reino Unido y Países Bajos.
Carmen Chaplin estuvo en Madrid con motivo del lanzamiento de la película y habló con EFE sobre un film que traza la conexión entre el origen social y el genio de una leyenda.
Lo hace a través de Michael, el segundo de los hijos que el actor tuvo con Oona O’Neil, y padre además de la directora, quien se embarca, así, en un viaje hacia la reconciliación familiar.
«Reconciliación en la pantalla»
Carmen cuenta para indagar en el origen gitano de Charles Chaplin con sus tías Geraldine, Jane y Victoria, así como con su tío Christopher, que dan testimonio sobre la particular personalidad del hombre que creó a Charlot, revolucionó y modernizó el cine.
No están solos. En el documental intervienen personalidades como Emir Kusturica, Johny Depp o el bailaor español Farruquito para ayudar a entender la influencia de la cultura gitana en el arte.
El personaje central, sin embargo, es Michael Chaplin. «Mi padre -señala Carmen- comenzó a buscar este origen gitano, pues siempre le ha gustado esta cultura y está muy orgulloso de ello. Descubrí que mi padre hablaba mucho del suyo, que Charlie quiso a Michael, y Michael a Charlie, y pensé que sería interesante juntarlos».
La consecuencia es «una película curativa». «Es lo que dice mi padre del documental porque creo que de alguna manera mi padre y mi abuelo se han reconciliado en la pantalla», ahonda la directora.
Un rebelde que «vino de la nada»
Tres apuestas formales sostienen la historia del documental: la música, la fotografía (de Kenneth Uribe) y la intercalación de imágenes íntimas e inéditas de la familia Chaplin, la mayoría procedentes de videos caseros y de álbumes privados.
Fue un hombre de fama mundial que «venía de la nada», afirma la realizadora. «Tuvo que creer mucho en sí mismo para tener tanto éxito. Es cierto que cuando empezó estaba todo por inventar en el cine, pero él creó su propio estudio e hizo las cosas como pensaba que debía. Superó muchas veces problemas de financiación. Estados Unidos no quiso que hiciera ‘El gran dictador’, por ejemplo».
Un espíritu indomable y libre guió al genio. «Él se costeó ‘El gran dictador’, nunca tuvo jefe, trabajaba al ritmo que le marcaba la inspiración. Todo lo que logró no hubiera sido posible si no eres un rebelde», incide Carmen Chaplin.
Una rebeldía que forjó el espíritu gitano de Chaplin.
La influencia de la familia
El Chaplin familiar que muestra el documental es un hombre célebre, «una figura enorme» conocido por su obra. En gran medida así lo veía también su nieta Carmen.
Hasta que comenzó a construir el documental. «Quería indagar en cómo fue crecer en esa pobreza ‘dickensiana’ en la que se crió y en la inspiración tan enorme que fue su madre», apunta la directora.
Pero también se propuso contar «cómo era crecer siendo hijo de una figura tan enorme».
El resultado es también una película sobre la familia. Ni más ni menos que la familia Chaplin.