Un presunto paramilitar muerto y dos efectivos militares dejó como saldo el ataque armado, que en horas de la tarde del pasado miércoles, contra el puesto de la Guardia Nacional Bolivariana, en el sector de La Mulata, municipio Pedro María Ureña y que repelido, en fuerte enfrentamiento que evitó que las instalaciones militares fueran tomadas y puso en fuga a los irregulares, que dada la proximidad de la frontera con Colombia, lograron cruzar hacia el vecino país.
Los hechos movilizaron rápidamente a comisiones de la misma Guardia Nacional, Ejercito Venezolano, así como de algunos organismos policiales, que acudieron en calidad de refuerzo fueron y fue durante una inspección y rastreo, que se encontraron con el cadáver del presunto paramilitar.
El enfrentamiento ocurrió a eso de las cinco y media de la tarde cuando los vigías de la tercera compañía del Destacamento No 212 de la Guardia Nacional Bolivariana, se percataron sobre la presencia sospechosa de varios hombres., que de inmediato comenzaron a disparar con armas de fuego de diversos calibres, utilizando incluso granadas de mano, que habrían lanzadas contra la instalación militar. El fuerte enfrentamiento armado permitió que la acción fuera repelida de inmediato.
Desde la sala de radio se dio la voz de alarma, cuando se notifico que el comando de la GNB de La Mulata estaba blanco de un ataque armado y que se requerían refuerzos. Inmediatamente partieron las comisiones, saliendo desde la sede del Destacamento 212 en Ureña y del Batallón de Infantería 251. Así mismo, acudieron comisiones policiales, que al llegar al sitio se encontraron con unas amplia movilización militar, que puso en fuga a los irregulares.
Un rastreo por las inmediaciones del comando de la GNB en La Mulera, llevó a la localización del cadáver de un presunto paramilitar, que fue identificado como Franklin Giovanni Velasco Chacón, de nacionalidad venezolana y 39 años de edad, residente en el sector.
Fueron reportados como heridos dos efectivos militares, concretamente el teniente Luis Ramos Ruiz, quien resultó con un disparo de arma de fuego en el brazo izquierdo y el sargento mayor Darwin Arenas Crespo, quien recibió herida rasante a la altura de la cabeza. Ambos fueron trasladados a centros asistenciales y tras recibir asistencia facultativa, retornaron a su cuartel.
Una comisión de la Base Contra Homicidios del Cicpc, sub delegación Ureña, llego para levantar el cadáver del civil y trasladarlo a la morgue del Hospital Central de San Cristóbal, en tanto que se iniciaron las investigaciones para establecer la identidad de los atacantes. Se comentaba que fueron dos los civiles fallecidos, y que ambos quedaron atrapados en la balacera cuando intentaban cruzar el rio. El segundo fallecido, sería un joven que laboraba como maletero, del cual no se conocen detalles. No hay confirmación sobre este particular, debido al hermetismo de las autoridades.
Hasta este jueves, ningún organismo paramilitar se había atribuido el ataque y se sabe, por versión de los lugareños, que los irregulares llegaron desde territorio colombiano, utilizando la proximidad del rio y que utilizaron la misma ruta para escapar, antes que llegaran los refuerzos.
De la investigación se supone que esta acción se corresponde con represalias de parte de grupos delincuenciales, por las labores que las autoridades han desarrollado en la zona de frontera, contra actos delincuenciales y de terrorismo que se vienen cometiendo desde hace tiempo, y que incluyen casos de extorsión, homicidio y contrabando, entre otros.
Se comentó por otra parte, que es el cuarto ataque armado contra este puesto militar cuya sede está a pocos metros de la línea de frontera con Colombia y que ha sido hostigado por parte de grupos irregulares del vecino país, que intentan obtener el control de esa zona, donde también han atacado a otros organismos de seguridad y cometido números homicidios, muchos de ellos en las trochas cercanas al puesto militar.