De forma categórica la Intergremial Universitaria del Nurr, la ULA en Trujillo, se suma al paro nacional de 48 horas en procura de salarios dignos. La paralización de la jornada laboral es este 28 de febrero y primero de marzo, como parte de una agenda de acciones pacíficas a nivel nacional.
Varias actividades programadas para tales fechas en la alma mater fueron reprogramadas. Los gremios institucionales, entre ellos Apula, Siprula, Aeula y Soula, ratifican que se mantendrán en pie de lucha hasta alcanzar justas reivindicaciones.
En el marco del despliegue no violento, el último día del mes en curso durante horas matutinas los ulandinos se concentrarán en la avenida Bolívar, del municipio Valera, específicamente cerca de la UPEL, para exigir, junto a otros sectores, el cumplimiento del artículo 91 de la Carta Magna.
Ópticas gremiales
Johny Humbría, presidente regional de la Apula, señala que la convocatoria es formulada por la Fapuv, como una escalada de la cruzada emprendida en todos los rincones del país desde enero.
“El alto gobierno sigue sordo a las demandas, no solo de los universitarios sino de todos los trabajadores públicos venezolanos. Continúan los sueldos de miseria y es así como lo que imperan son pagos de pobreza”, lamenta.
Agrega que “salimos de nuestras aulas de clases nuevamente, no porque queramos dejar a los estudiantes, quienes día a día permiten hacer universidad, es debido a una situación crítica, paupérrima, pues lo devengado no alcanza para cubrir la canasta alimentaria”.
Mientras que Mirgravy Betancourt, secretaria de reclamos del Soula Trujillo, apunta que “participemos unidos contra la indolencia del gobierno nacional y su instructivo violador de la Onapre, también en rechazo a los salarios de hambre, devaluados con el alza diaria del BCV, en contra de las bonificaciones engañosas del Sistema Patria y de la suspensión del HCM”. La dirigente sindical aboga por un aumento salarial y pensiones indexadas al costo real de la vida venezolana. PRENSA ULA-NURR / Gilcely Linares (CNP 15.221)