Moscú/Kiev, 20 feb (EFE).- La situación en los frentes de batalla parece haberse estancado en un duelo en el que Ucrania apuesta por el desgaste de las tropas rusas en el este del país, donde tienen lugar los combates más encarnizados con un elevado coste en vidas humanas para ambas partes, y se prepara para contraatacar.
«Insisto una vez más. Cuantas más pérdidas tenga Rusia en el Donbás -Bajmut, Vuhledar, Mariinka, Kreminna-, antes podremos poner fin a esta guerra con la victoria de Ucrania», afirmó tras reunirse anoche con su alto mando el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, que hoy recibió un potente espaldarazo con la visita a Kiev del presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
UNA VISITA OPORTUNA
La llegada del jefe de la Casa Blanca a la capital ucraniana y sus anuncios de ayuda no podían ser más oportunos para las autoridades de Kiev, que afrontan en el frente oriental una ofensiva de las fuerzas rusas.
«Tras recibir previamente garantías de seguridad, Biden finalmente viajó a Kiev. Prometió muchas armas y juró lealtad hasta la sepultura al régimen neonazi de Kiev», escribió el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente del país, Dmitri Medvédev en su canal de Telegram, al comentar la visita del mandatario de EEUU.
Y es que Biden anunció en Kiev un nuevo paquete de ayuda militar, por un monto de 500 millones de dólares a Ucrania, en momentos cuando sus Fuerzas Armadas resisten los embates del Ejército ruso, principalmente junto la ciudad de Bajmut, en la región oriental de Donetsk.
«El resultado de estas visitas sin duda se verá en los campos de batalla, en el fortalecimiento de nuestros combatientes y la liberación de nuestros territorios», dijo Zelenski sobre la presencia de Biden hoy en Kiev y sobre su propio viaje a Washington en diciembre pasado.
Zelenski destacó: «Estamos enderezando la situación. Hacemos todo para preparar nuestras acciones para el futuro, un futuro próximo».
LAS TROPAS RUSAS ATACAN PERO SIN GRANDES AVANCES
En las últimas semanas las tropas rusas han intensificado sus ataques contra las posiciones ucranianas en la regiones de Donetsk y Lugansk y han conseguido pequeños avances.
Según el último informe del Instituto sobre el Estudio de la Guerra (ISW, por su siglas en inglés), la principal fase de la ofensiva rusa tiene lugar en la región de Lugansk, pero el Ejército ruso no cuenta con reservas suficientes para aumentar su magnitud y su intensidad en lo que resta de invierno europeo.
La proximidad del primer aniversario del comienzo de la campaña militar rusa para «desmilitarizar y desnazificar» Ucrania, que se cumple el próximo jueves, ha sido interpretada por expertos rusos y ucranianos como una ocasión propicia para que Rusia lance una gran ofensiva.
Sin embargo, los avances en el terreno han sido magros si se considera la avasalladora superioridad que se le suponía al Ejército ruso.
El Ministerio de Defensa de Rusia confirmó hoy la toma de la Parakoviivka, una localidad al norte de Bajmut que antes del estallido de las acciones bélicas tenía cerca de 2.800 habitantes.
Según el mando ruso, el control de Parakoviivka ofrece la posibilidad de aumentar la presión sobre Bajmut, cuyo control es clave para allanar el avance hacia las ciudades de Kramatorsk y Sloviansk, la principales plazas fuertes ucranianas en la región de Donetsk.
«Es importante defender la ciudad (Bajmut), pero no a cualquier precio, al precio de que mueran todos. Vamos a luchar mientras sea razonable (…).
Resistimos y al mismo tiempo estamos preparando la próxima contraofensiva», afirmó Zelenski en declaraciones a la prensa italiana.
RUSIA DICE QUE COMBATE CON LA OTAN
Rusia insiste en que en Ucrania combate no tanto con el Ejército cuanto con la OTAN.
El Servicio de Espionaje Exterior (SVR) de Rusia declaró hoy que los países de la OTAN han suministrado a Ucrania 440 tanques soviéticos, además de otro tipos de armamento pesado.
«Desde diciembre de 2021, los países de la OTAN enviaron a las Fuerzas Armadas de Ucrania 1.170 sistemas antiaéreos, 440 tanques, 1.510 vehículos blindados de infantería y 650 sistemas de artillería», señaló el SVR en un comunicado.
Ucrania, que ha estado utilizando tanques T-72 durante décadas, ha recibido cientos de tanques soviéticos modernizados de Polonia y Chequia, y está a la espera de recibir los primeros tanques Abrams, Challenger 2 y Leopard 2 de Occidente.
Según el espionaje ruso, Ucrania recibió además de los miembros de la Alianza 9.800 misiles para lanzaderas múltiples, 609.000 proyectiles antitanque y otra munición.
«Gran parte del armamento proporcionado por Occidente ha sido destruido por las tropas rusas», subrayó el SVR.