El retorno a las actividades habituales después de cierto período vacacional, coloca a cada individuo en una situación de readaptación que, en ocasiones, pudiera obligarlo a someterse a procedimientos psicológicos para vencer una sintomatología similar al estrés, según opinión que comparten algunos expertos.
En relación con los escolares, que se reincorporan este mes a las aulas, la licenciada María Mendoza, psicólogo infantil de Fundaciv, comenta que en estos tiempos es común ver niños somnolientos en las aulas, debido a que durante el período vacacional tuvieron ciertas libertades -concedidas por sus padres- para dormir hasta altas horas de la noche y hacer uso, por períodos prolongados, de equipos tecnológicos como celulares, tabletas, laptos y televisión, considerados como potenciales estimulantes para eliminar el sueño.
Considera Mendoza que el sueño es uno de los principales hábitos del ser humano para su rendimiento personal en cualquier actividad que realice. En el caso del niño y adolescente en edad escolar, es muy importante pues tiene repercusión en la adaptación y rendimiento escolar, y puede repercutir en la atención escolar y en el manejo de sus niveles de estrés.
“Un niño que no tiene correctos hábitos del sueño comúnmente se despierta somnoliento, malhumorado y puede presentar dificultades de atención durante la jornada escolar, además de estrés, cansancio, tensión muscular y ansiedad por comer, entre otros”, precisa la vocero.
En tal sentido, la psicóloga recomienda la necesidad de que, tanto niños como adolescentes tengan al menos ocho horas de sueño efectivas por las noches, lo cual contribuirá en el aumento de su capacidad de retención de las actividades escolares. Igualmente sugiere evitar las cenas con altos niveles de carbohidratos y azúcar; desayunar en casa antes de salir a la escuela (evitar que coman durante el trayecto al plantel) y evitar que durante el día tenga siestas largas.
“También es importante disminuir el uso de pantallas y videojuegos en horas de la noche, ya que ello activa la mente, postergando la llegada del sueño por varios minutos o inclusive horas, al tiempo que afecta la calidad del sueño”, destaca Mendoza, experta en problemas de aprendizaje, trastorno por déficit de atención e hiperactividad y convivencia escolar.
*María Clemencia Mendoza Hitcher, es Licenciada en Psicología Clínica Dinámica, egresada de la Universidad Central de Venezuela, y además de formar parte del equipo de salud de la Fundación Centro Venezolano-Italiano (Fundaciv) es poseedora de una amplia experiencia en el abordaje de problemáticas en el área infanto-juvenil, tales como trastornos emocionales y conductuales, entre otras.