Transportistas con la “soga al cuello” a punto de aumentar el pasaje a Bs. 1.000

Gráficas: Francisco Vergara

Ayer, los presidentes de las líneas urbanas del municipio Trujillo estaban en la cámara municipal, buscando respuestas  a un comunicado llevado el pasado martes, en el que  solicitaron el aumento del pasaje del transporte público de Bs. 500 a Bs. 1.000 negociables, sin embargo, ayer no tuvieron suerte, aunque los concejales los atendieron, no pudieron darles respuestas, pidieron ser atendidos por el nuevo alcalde que estaba en el salón de sesiones, pero éste dijo que no tenía previsto reunirse con ellos, y no lo hará hasta la próxima semana que venga de Caracas donde se tratará este tema del pasaje y la crisis del transporte.

Sin embargo, los transportistas aseguraron que esperaban ser atendidos, “porque la intención ha sido consultar, dialogar, llegar a acuerdos sin  tomar decisiones apresuradas que incomoden a los usuarios”, afirmaron,  pero ante la negativa del nuevo alcalde, y teniendo ellos una decisión ya discutida dentro de las líneas, desde hoy empezarán a cobrar Bs. 1.000 en las rutas urbanas, porque el alto costo de la vida, la hiperinflación, el costo de los insumos los mantiene con la “soga al cuello” y no pueden subsistir con un pasaje a Bs. 500.

Los concejales Freddy Calderón, Gustavo Delgado y Johnny Perdomo hicieron los enlaces para que el alcalde Angerson Hernández los atendiera, al menos para que los escuchara, pero no fue posible,  y los transportistas manifestaron que no les dejan otra opción que empezar a cobrar el aumento, tal como lo han hecho en la mayoría de municipios y que sólo faltaba Trujillo capital buscando concertar con la autoridades municipales. Tuvieron la mejor intención pero no tiene otra alternativa.


Bomba de tiempo

La situación del transporte público parece una bomba, que cada día amenaza con estallar, porque no sólo se trata del aumento del pasaje, sino las condiciones en las que están trabajando las unidades de transporte, las cuales son un riesgo tanto para los usuarios como para quienes las manejan, por ello es urgente que las autoridades tomen cartas en el asunto porque si el transporte público desaparece ¿dónde vamos a parar, a andar en camiones, o sencillamente dejar de trabajar porque no hay como trasladarse? Vamos pa’ atrás como el cangrejo.

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