Este lunes 16 de enero maestros, profesores, trabajadores del sector salud y de la administración pública salieron a las calles de la ciudad de Valera, acatando la convocatoria nacional del magisterio.
Mireya Quevedo, trabajadora jubilada del Ministerio del Ecosocialismo, lamentó que la pensión no le alcanza para cubrir sus necesidades básicas. “Con estos sueldos de hambre, mi mamá y yo sobrevivimos gracias a remesas”, alegó.
Quevedo denunció que los constantes aumentos en el precio del dólar ha “pulverizado” hasta las remesas que su hermana le envía mensualmente desde España.
“La remesa ya no nos alcanza ni el 40% de lo que nos alcanzaba antes”, lamentó la trabajadora jubilada, quien vive junto a su madre en la ciudad de las siete colinas.
La concentración de los manifestantes comenzó a las 9 de la mañana en la Casa del Educador. Desde allí, los asistentes marcharon hasta la Defensoría del Pueblo y posteriormente a la Inspectoría del Trabajo, en donde entregaron unos documentos en los que exigen “salarios dignos y acordes con el índice inflacionario del país”.
En el oficio los educadores exigen el cumplimiento del artículo 91 de la Constitución, en el que se le da el derecho a los trabajadores de obtener sueldos dignos con los que puedan cubrir sus necesidades.
“Nuestros jubilados no se murieron por la pandemia, se van a morir de hambre”, expresó Sulvia Torrealba, presidenta del Colegio de Enfermería del estado Trujillo, frente a los cientos de maestros y trabajadores que se desplegaron a lo largo de la Avenida Bolívar.
Representantes del Magisterio anunciaron que durante esta semana estarán en las instituciones educativas para crear los comités institucionales para promover el apoyo de los padres y representantes con los maestros.
Por último, los docentes recalcaron que no abandonarán las aulas de clases, pero seguirán con acciones de calles semanales para hacer valer sus derechos.
LLO,
Por: Génesis Chinchilla ECS