Tokio, 21 oct (EFE).- Los organizadores de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Tokio 2020 han puesto a prueba las medidas de seguridad que barajan, en las que a los controles rutinarios se sumarán medidas anti-covid como el uso de pegatinas termosensibles.
Tokio 2020 ensaya desde el lunes decenas de escenarios para el establecimiento de medidas de control en las áreas de acceso y tránsito de espectadores y personal, un trabajo sobre el terreno que abrió a la prensa este miércoles, último día de las pruebas.
Durante los ensayos se probaron la funcionalidad de dispositivos como detectores de metales, escáneres, cámaras térmicas o termómetros con infrarrojos para medir la temperatura a distancia, y se instó a los participantes a guardar distancia de seguridad mientras esperaban, como medida contra la propagación de la covid.
«Queremos probar varias medidas contra la pandemia», dijo en una sesión informativa en el evento el director ejecutivo de la división de seguridad de Tokio 2020, Tsuyoshi Iwashita, quien señaló que uno de los principales objetivos del simulacro era ”mostrar cómo estamos trabajando para garantizar la seguridad durante los Juegos».
Ataviados con mascarillas y protectores faciales transparentes (que pueden cubrir la cara entera o desde la barbilla hasta la nariz), el personal de seguridad de los controles recibió durante varias rondas a una veintena de voluntarios de la organización en representación del público.
Los «espectadores» se sometieron a medidas de temperatura con termómetros con infrarrojos o se pegaron en la muñeca una pegatina termosensible que se pone roja si la temperatura de la superficie supera los 37 grados centígrados, un indicio de tener fiebre y uno de los síntomas más comunes de la COVID-19.
Tras pasar los controles ya rutinarios de equipaje y detectores de metales, el personal de seguridad pidió a los asistentes que bebieran un sorbo de su bebida, si llevaban alguna.
Tokio 2020 planea permitir que los espectadores metan en los estadios una botella de bebida propia, pero exigirá que se pruebe su contenido con antelación para comprobar que no son sustancias dañinas.
Para su propio personal, la organización contempla el uso de cámaras térmicas para comprobar la temperatura a su llegada y tecnología de reconocimiento facial.
Las pruebas de esta semana tenían como objetivo también recopilar datos como el tiempo necesitado para el control por espectador, que se estudiarán en adelante para optimizar las medidas a adoptar.
«En los Juegos habrá mucha más gente y tendrán lugar en una época mucho más calurosa. (…) También tenemos que pensar en esto», dijo Kozue Tanno, una de los miembros del personal de seguridad, que corre a cargo de las empresas SECOM y Sohgo Security Services.
Iwashita recordó que Tokio 2020 «todavía no ha decidido las medidas que finalmente se adoptarán» y al ser preguntado sobre los procedimientos de desinfección que se establecerán para los controles dijo que «todavía están bajo consideración».
Sobre el protocolo de la organización ante el descubrimiento de un brote de contagios de covid entre el personal o los voluntarios durante los Juegos, el responsable de la división de seguridad señaló que tal escenario se está estudiando junto a las autoridades de la capital, con las que se reúnen periódicamente.