De seis oficinas que tiene el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) en el estado Trujillo, solamente dos están activas para tramitar la cédula de identidad. Los usuarios de los 20 municipios de la región, deben trasladarse hasta las sedes principales de Trujillo y Boconó.
Las personas hacen fila y se anotan en listas, de hasta 100 personas diarias, para poder obtener el documento, muchas se van con las manos vacías, debido a que al final de la jornada las sedes se quedan sin material o les falla el sistema.
Niños primero
Los encargados de dar información en la puerta de la oficina en el municipio capital, manifestaron que los niños quienes van a sacar la cédula por primera vez, tienen prioridad. Pueden llegar desde las 8:30 de la mañana hasta las 4:00 de la tarde y ser atendidos solamente con presentar la partida de nacimiento original y certificada.
El inconveniente lo tienen quienes van a renovarla. Yenitze Alarcón, procedente de la Mesa de Esnujaque del municipio Urdaneta, comentó que este 7 de febrero es su cuarto intento para sacar su cédula.
«Tengo bastante tiempo aquí, desde la mañana y ya son las once, de hecho no entré en la primera lista y me tocó hacer la colita igual, tengo 90 personas por delante, yo estoy viniendo desde diciembre y quedé en el portón” explicó.
Alarcón cuenta que para llegar a Trujillo debe abordar hasta tres unidades de transporte. Como no puede costearse ese gasto en pasajes, se traslada en los buses rojos del Ministerio del Transporte.
Sin sistema
El Saime tiene tres oficinas principales (Valera, Trujillo y Boconó) y otras tres, que han habilitado: Miranda, Pampán y San Rafael de Carvajal. Esta última, ubicada en el Aeropuerto Antonio Nicolás Briceño, no tiene sistema. Lo mismo ocurre en Valera, donde confluye la mayor cantidad de habitantes del estado. Otro de los problemas frecuentes en el retardo del proceso de renovación es la falta de material.
Un derecho
La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela estipula en su artículo 56, que “Toda persona tiene derecho a ser inscrita gratuitamente en el registro civil después de su nacimiento y a obtener documentos públicos que comprueben su identidad biológica”. Es decir, que debido a los retrasos en la obtención de los documentos, a los ciudadanos se les viola un derecho fundamental.
Foto 1: Largas colas se observan en la oficina del Saime en Trujillo. Foto: María Gabriela Danieri