Hasta el amanecer resonaron las ráfagas de disparos en la parte alta y rural de la parroquia San Luis, dejaba entender que hombres armados tenían un festín y en medio de tragos y armas, la mejor manera de celebrar era descargándolas al aire.
En el Zanjón del Pescado, uno de los caminos de tierra que se visualizan a mano izquierda, desde la carretera hacia el Casino Militar de Valera escondía a seis sospechosos de la banda “Los Venegas” quienes estaban huyendo de la justicia.
Por lo menos seis individuos descargaron sus armas a mitad de la montaña, sin ninguna interrupción, pero con la luz del sol, ocurrió lo inesperado, equipos de la Unidad de Investigaciones de la Coordinación Policial 2 de las Fapet y la PNB sorprendieron a los bandidos, a 60 metros aproximadamente de la carretera principal.
El fuego cruzado inició cuando uniformados y bandidos se encontraron en el área montañosa, una pendiente de difícil acceso, camino de tierra arenosa y sólo es posible ingresar a pie.
En medio de las balas, los maleantes se dispersaron buscando esconderse de la mira de las comisiones policiales, pero dos fueron heridos y cayeron en el terreno junto a las armas que empuñaban.
Ocho uniformados se encargaron de levantar a los heridos, por cada extremidad fueron sujetados para llevarlos al Hospital de Valera lo más pronto posible, justo lo que permitía el descenso en la cuesta. Luego del ingreso a la sala de trauma shock quedaron sin signos vitales.
Comisiones policiales continuaron tras el rastro de “Martín”, “Zombie” y “Lágrimas” sujetos de alta peligrosidad, quienes se perdieron en la zona boscosa.
La autoridad de la Coordinación Policial 2 de las Fapet, Comisionado Wílmer Ramírez reveló detalles a los medios de comunicación sobre el proceso ejecutado por la Unidad de Investigaciones a su cargo, que trabajó en conjunto con la PNB.
Los fallecidos fueron parte de la banda de Agua Blanca de Motatán, cotizaban para “Los Venegas” y también para “El Colombiano” según las autoridades.
Las víctimas eran hermanos: Robert Rafael de 24 años y Jhon Rommer Albarrán Viloria de 22, conocidos en el mundo delictivo como “El Robert” y “El Titi”, ambos con antecedentes y solicitud ante la ley.
Robert estuvo residenciado en el estado Lara desde hace años, viajaba constantemente y llegó hasta el municipio Boconó, por delitos como extorsión, cobro de vacuna y robo.
Sus antecedentes revelaron desvalijamiento de vehículo ante el Cicpc Boconó este año, robo genérico en 2016 por la Sub Delegación Barquisimeto, estado Lara y estaba requerido por el Juzgado 5º de Control del estado Trujillo, por homicidio calificado.
Portaba un arma de fuego tipo revólver, marca Rossi, calibre 38mm, serial W150631 solicitada desde 1999, por hurto genérico.
La autoridad de la CPP2 manifestó además que Jhon Rommer “El Titi” también andaba con su hermano cometiendo delitos en el estado Trujillo y Lara; por ello su primer antecedente en 2014 fue en la tierra de los crepúsculos, por robo genérico. En 2016 la Sub Delegación Valera le reseñó cambio ilícito de matrícula y seriales de vehículos; mientras que este año participó en un homicidio, razón por la cual su nombre tenía una solicitud del Juzgado 5º de Control, con fecha 20-01-2017. El arma incautada fue una escopeta, marca Cavim, calibre 12mm.
Los cuerpos ingresaron a la morgue forense del Pedro Emilio Carrillo ayer a las 10:30 de la mañana; aunque en menos de una hora acudieron familiares a reconocer los cadáveres no aportaron datos a los medios, sobre lo ocurrido.
Contra funcionarios
A los hoy occisos les habían pagado dos millones de bolívares para acabar con la vida de funcionarios policiales que actuaron en el procedimiento de Jalisco, municipio Motatán donde fallecieron los hermanos Yeferson Venegas Daboín alias “El Guajiro”, Yekson Venegas Daboín, “El Gringo” y Víctor Alfonso Moreno “El Grillo” en represalia por las bajas en el grupo criminal.