Un terremoto de magnitud 6,9 que sacudió el mar al sureste de la isla de Mindanao, la principal en el sur del país. Las autoridades retiraron alerta de tsunami que horas antes había girado.
La alerta de tsunami del Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología (PHIVOLCS) venció a las 02.00 hora local (06.00 GMT).
El Centro de Alerta de Tsunami del Pacífico también canceló su alarma sin que hubiese observado la formación de alguna ola gigante.
Las autoridades filipinas no han informado de víctimas o daños como consecuencia del terremoto.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que registra la actividad sísmica en todo el mundo, localizó el hipocentro a 59 kilómetros en el suelo marino y a 183 kilómetros al sureste de Davao, ciudad principal de Mindanao.
La agencia de vulcanología y sismológica de Filipinas elevó la magnitud a 7,2 según sus registros.
El seísmo se produjo cuando Filipinas, y sobre todo las regiones central y septentrional, se encuentra en alerta por la presencia de la depresión tropical que los filipinos llaman Usman, que ha causado tres muertos, un matrimonio y su hijo de tres años.
Filipinas se asienta sobre el llamado ‘Anillo de Fuego del Pacífico’, una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría moderados.