La periodista Erika Verdi, conocida comunicadora social que ejerce en el Táchira y labora para la página de noticias @tachiranews, presentó este martes una solicitud de investigación ante la Fiscalía del Ministerio Público en la región, tras ser expuesta su imagen y su nombre en una cuenta de Instagram que no tiene titularidad de nadie, donde la vinculan con grupos subversivos, sin ningún tipo de prueba.
La página de Instagram se hace llamar «denunciaTáchira», en esta presentan montajes fotográficos con la imagen de Erika Verdi junto a otro grupo de mujeres, y aseguran que trabajan para la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia –FARC- y en el encabezado de las gráficas escriben “los más buscados en el departamento de Arauca”, incluso, le ponen un traje militar y armas.
El Ministerio Público, en San Cristóbal, recibió este martes la denuncia de la periodista Erika Verdi, y el caso será investigado, según señaló la comunicadora, quién acompañada de la secretaria general del Colegio de Periodistas, seccional Táchira y las delegadas del Sindicato de Trabajadores de la Prensa y corresponsales de IPYS, Judith Valderrama y Lorena Arraíz, pidieron dar con quienes se valen del anonimato en redes sociales para exponer a comunicadores sociales y poner en riesgo su integridad moral y física, así como la de sus familiares, atentando, además, contra el ejercicio profesional.
La acusan de informante de la FARC
La preocupación de los representantes gremiales de los periodistas en Táchira por la situación de Erika Verdi, se sustenta en lo que publica la página de Instagram en referencia, donde indican que les llegó un supuesto informe, que sostiene que la periodista Verdi, a quien citan con su nombre completo, “estaría trabajando como informante del grupo armado terrorista de la FARC, con quienes ha sostenido reuniones en diversos sitios del Táchira”, señalan, los ahora investigados.
En la misma publicación de la página de Instagram, agregan que Verdi, “recoge información usando su fachada de comunicadora social y luego la transmite a las disidencias, quienes atraviesan enfrentamientos contra el Ejército de Liberación Nacional ELN y contra el propio Ejército Nacional Bolivariano de Venezuela, por el territorio de Apure”.
En el panfleto, que no tiene ninguna firma de su creador o creadores, también aseguran que la periodista tachirense usaba su otro trabajo como agente de bienes inmuebles en Táchira, para realizar labor de inteligencia, y que luego vendía sus clientes a la guerrilla, para que estos fueran extorsionados, publican.
Preocupación
“Afectan mi integridad y mi imagen pública”, dijo Verdi a los medios de comunicación a las puertas del Ministerio Público, en San Cristóbal.
«Esto me tiene muy preocupada porque para nadie es un secreto la seguridad en nuestro país, además, es un estado fronterizo, pues, es un riesgo para cualquier persona. Sobre todo, como mujer es muy peligrosa esta situación, porque es una persona que se escuda en una red social de manera anónima y hace de esto una publicación, y genera información falsa y puede hacer el daño a una persona”.
La comunicadora social fue recibida por el fiscal superior del Táchira y remitida a la fiscalía sexta que se encargará de la investigación.
“Vamos a esperar que sea el Ministerio Pública el que haga la investigación pertinente porque no tengo a una persona directa a quien indicar, porque no. Todos mis colegas periodistas que me han expresado su apoyo, saben que no manejo ninguna confrontación con nadie, no genero ninguna disyuntiva, ni contrariedad con nadie, entonces, no debo tener ningún problema con nadie, por lo que no tengo a quien inculpar”.