SAN CRISTÓBAL. El profesor Francesco Stifano junto a su tropa, propusieron los argumentos para celebrar frente al Deportivo Anzoátegui; el esquema permitió pisar constantemente el área rival, generando situaciones claras de gol, encontrándose con un correcto César Vásquez.
“Lo único que puedo rescatar fueron las constantes situaciones de gol que generó el equipo, lamentablemente no pudimos concretarlas”, comentó el director técnico del Carrusel Aurinegro, al finalizar la riña en Pueblo Nuevo, con sensaciones amargas por la necesidad que existe de comenzar a sumar de a tres.
“Aposté todo para ganarlo, saqué a (Luis) Melo, a (Héctor) Noguera, sabía que era un partido para ganarlo, para mí fue una derrota, me voy con un sabor amargo”, comentó el estratega a los medios de comunicación de la región, en relación a los esquemas que utilizó para intentar adjudicarse la victoria.
El último pase a las redes es el factor que no se ha podido engranar, considerando las múltiples ocasiones creadas para poder marcar, no solo ante los de Puerto La Cruz, también se han presentado las mismas situaciones en las pasadas disputas.
“Tenemos un problema de profundidad en ataque, no podemos ocultarlo”, soltó Francesco con responsabilidad, manifestando al mismo tiempo su compromiso para superar los momentos difíciles.
Jugadores se autocritican
Las emociones del Carrusel Aurinegro, tras el empate sobre el Deportivo Anzoátegui, no fueron de satisfacción, marchándose al camerino con la sensación que la pizarra pudo haberse inclinado a su favor.
El encuentro dejó dos momentos históricos, Joynner Rivera y Luis Páez marcaron su primera anotación con la camiseta amarilla y negra; sin embargo, los efectivos no se conformaron con el hecho de definir, deseando que sus tantos aportaran a la conquista.
“Es un empate con sabor a derrota, nos vamos tristes, generamos y llegamos mucho más que ellos; pero así es el fútbol”, comentó el tachirense Rivera, en su balance del cotejo donde pudo estampar su firma.
Acató las instrucciones del entrenador Stifano, ingresando con convicción desde el banquillo, “me dijo que me tuviera confianza, que encarara y que aprovechara mi velocidad; lastimosamente no se pudo, logramos sacar un empate”.
Por la línea defensiva, el panameño Jan Carlos Vargas tomó la vocería, reconociendo que hubo desatenciones que pasaron factura sobre el final del compromiso, “los errores nos costaron para no poder sacar el resultado”.
Luis Melo habló por los mediocampistas, convencido en superar la crisis de resultados, entendiendo que la parcialidad tachirense se merece ver a su escuadra en lo más alto, “la situación nos preocupa a todos, estamos en deuda con la afición, con el estado; tenemos que reflexionar para saber qué estamos haciendo mal”.
Fuente: Prensa Deportivo Táchira