Páez, que hasta ese momento era Teniente Coronel, asumió la jefatura y actuó como General de Brigada; bajo sus órdenes estaban dos generales, Urdaneta y Serviez, además de Santander más otros coroneles y comandantes. La batalla se resolvió a favor de los republicanos, permitiendo la pronta toma de Achaguas.
Los 700 hombres estaban divididos en tres grupos a las órdenes de Urdaneta, Santander y Serviez, ya que a mediados de año, las guerrillas y los Jefes Supremos habían nombrado a Páez como Jefe Supremo. Urdaneta, Santander y Serviez tenían una jerarquía militar mayor a la de Páez, pero aceptaron quedar bajo sus órdenes, para evitar división en las fuerzas republicanas de la zona.
Al acercarse y presentar pelea con su Caballería de bravos llaneros a los españoles, la primera bala mata a su caballo; con rodilla en tierra arenga a su tropa a vengar a su caballo, después derrotan a los realistas. En las orillas del río Arauca, consiguiendo el control de los llanos de Apure.
En el sitio donde se realizó la Batalla se encuentra un Monumento Conmemorativo llamado “Brazo de Páez”, que simboliza un Brazo del General con una lanza usada en dicho combate. A partir de esa victoria, el ascendiente de Páez creció en los llanos y entre el ejército patriota.
Cuando Francisco de Paula Santander pretendió asumir el mando de las tropas, éstas lo desconocieron y sólo aceptaron a Páez como jefe del ejército de los llanos venezolanos.