Bajo la lluvia personal docente, administrativo, obrero, trabajadores de la salud, abogados, empleados públicos, estudiantes, entre otros, se concentraron este lunes 23 de enero en el Obelisco de Los Italianos para conmemorar el “día de la democracia”, actividad que culminó con una marcha hacia la plaza Daniel Tinoco en la avenida Carabobo.
Con pancartas con los mensajes: “¡Docentes unidos! Yo no me quiero ir, yo quiero un sueldo digno para quedarme en mi país”, “todo está dolarizado menos el sueldo”, “Inces Táchira presente. Exigimos pago de bono de producción, cumplimiento plan recreacional para jubilados y pensionados, condiciones óptimas de salubridad”, “esenciales para el pueblo, invisibles para el estado. Sector salud”, “héroes sin capa y sueldos de hambre. Sector salud”, “libres para liberar”, “libertad para Javier Tarazona”, entre otros, los asistentes aseguraron que se mantendrán en las calles hasta lograr salarios justos y dolarizados.
Evencio Zenón, secretario general del Sindicato de los Trabajadores de la Enseñanza del estado Táchira y miembro de la coalición sindical, manifestó que la protesta cesará el día que tengan un aumento salarial de un mínimo de 400 dólares, por cuanto los sueldos deben cubrir la cesta básica.
Indicó que no se dejarán amedrentar con los nuevos anuncios gubernamentales de que los educadores que dejen solas las aulas para protestar serán sometidos a los consejos de protección del menor, pues la exigencia de un derecho salarial para poder acceder a la alimentación y a la comida también está establecido en la Constitución de la República.
Por su parte, Alexander Lamus, secretario de reclamos del Colegio de Licenciados, indicó que se han presentado casos de amedrentamiento y manipulación en contra del personal de las instituciones educativas.
Denunció que en el Liceo Gonzalo Méndez, ubicado en Madre Juana, el jueves llegó personal de la Zona Educativa a indicarle a los docentes que debían incorporarse a las aulas de clase, que debían esperar un anuncio del gobierno. “Creando una polémica para que el docente se sienta con miedo, pero yo le digo a ese grupo de docentes del Liceo Gonzalo Méndez que tienen que estar unidos con el personal obrero y administrativo”, dijo.
Acotó que la idea es que a nivel nacional se concrete una unión entre gremios para alcanzar objetivos. “La idea es que el empleado público pierda el miedo, estamos amparados por la Constitución, por la Ley del Trabajo, por el contrato colectivo de cada sector, es justo de que se mantenga esta movilización a nivel nacional para lograr el salario y condiciones sociales”.
“Grito de auxilio”
El presidente de la Federación Venezolana de Maestros, Ildemaro Useche, manifestó que la situación crítica que enfrentan los docentes, la viven todos los sectores sociales, motivo por el cual este 23 de enero se unieron todos los gremios. “Los venezolanos hoy estamos dando una alerta, un grito de auxilio, de libertad, porque nosotros vamos a seguir en la calle hasta que el gobierno entienda que tiene que reivindicar, que tiene que dignificar la carrera docente”.
Destacó que no son solo salarios, sino también la necesidad de que sea reparada la infraestructura escolar, y que vuelva el Programa de Alimentación Escolar (PAE) a cabalidad. “A los niños se les violan sus derechos cuando el gobierno no tiene escuelas en óptimas condiciones para darles una educación de calidad. El gobierno ha querido delegar en los padres y representantes, en los docentes las competencias que a ellos les corresponde, que es tener instituciones en óptimo estado”.
Corpoelec
Angela Velandria es jubilada de Corpoelec. Su sueldo es de 280 bolívares mensuales, los cuales no le alcanzan para solventar sus necesidades, por lo que se ve obligada a buscar otras formas de ingreso para cubrir los requerimientos básicos.
“Estamos invitando a todos mis compañeros jubilados y activos de Corpoelec que nos integremos como uno solo para luchar por lo que nos corresponde, para luchar por lo que nosotros hemos trabajado. Integrémonos todos como uno solo, por aquellos venezolanos que han salido al exterior, por las familias que están desunidas por los que se han ido”.
Cambio de sistema
Para el dirigente juvenil del Táchira, Kenny Ramírez, no se trata sólo de exigir salarios, sino también la salida del sistema comunista. “Porque con este gobierno, mientras que pasen los meses y los años, las familias seguirán separadas y seguirán con pobreza extrema”, acotó.
Recordó que hace cinco años el estudiante de la Universidad de Los Andes, Luigi Guerrero, fue asesinado en medio de las protestas del 23 de enero.
Se espera que los sectores sociales anuncien en las próximas horas cuáles serán las actividades que desarrollarán en el marco de las exigencias salariales y de la firma del contrato colectivo.
