Venezuela ha sufrido una de las depresiones económicas más grandes en la historia lo que ha convertido al estado petrolero en uno de los países con los salarios más bajos de Latinoamérica afectando directamente al sector público laboral
Navih Elkheidi/ECS
Venezuela es uno de los países con la mayor reserva petrolera en el mundo y dicha producción llegó a posicionar al país con una de las economías más estables entre los años 80 y 90 garantizando así un estilo y calidad de vida para todos los habitantes del país que tenían la oportunidad de un empleo en algunas de las compañías más importantes de la nación que ofrecían a sus trabajadores profesionales salarios que les garantizaban una posición económica muy estable.
Actualmente las empresas e instituciones del sector público han sufrido descensos económicos debido a la alta inflación y devaluación monetaria que ha desestabilizado al sector económico en general afectando principalmente al poder adquisitivo de los venezolanos cuyos salarios no cubren ni la cuarta parte de la cesta básica alimenticia.
Para enero del año de 1998 un trabajador común cotizaba un salario de 75 mil bolívares mensuales con un bono de alimentación de 81.400 bolívares dando un total de 156 mil 400 bolívares al mes para esa fecha esto representaba un total de 307 dólares aproximadamente. Hoy en día la realidad es totalmente distinta, ya que con un sueldo de 40 mil bolívares más un bono de alimentación de 25 mil, el venezolano común solo puede percibir como mínimo un salario de 3 dólares mensuales aproximadamente.
Sector público afectado
Varios trabajadores del sector público han expresado su descontento por no poder cubrir sus necesidades con un salario tan bajo indicando que los profesionales de mayor grado de especialidad solo logran percibir hasta 140 mil al mes sin contar las bonificaciones especiales de alimentación y programas de protección social implementados por el gobierno para el pago de bonos a través del carnet de la patria. Dichos bonos han llegado a acreditar desde 50 hasta 75 mil bolívares lo que garantizaría un total de 215 mil bolívares aproximadamente. Dicho sueldo se queda pequeño frente a una canasta básica que supera los 3 millones de bolívares.
Ingenieros, licenciados, abogados, médicos eran algunas de las profesiones más anheladas por aquellas personas que deseaban disfrutar de un estilo de vida con estabilidad económica elevada. Dichas carreras se han visto reducidas por las bajas remuneraciones que recibían estos profesionales que han optado por otras opciones de empleo para poder sobrevivir.
Trabajo independiente favorable
Profesionales de diversas áreas han expresado que la opción del trabajo independiente genera mejores ingresos que los obtenidos en un trabajo tradicional en cualquier institución pública, tal es el caso de Orlando Marín, un licenciado en contaduría pública que se ha dedicado al oficio de mantenimiento e instalación de aires acondicionados indicando que trabajando de manera independiente se pueden obtener ingresos de hasta 50 veces más que los que ofrece cualquier empresa.
Muchos empleados han tomado la iniciativa de renunciar a sus puestos de trabajo tomando la opción de emigrar a otro país, iniciar sus propios negocios o buscar empleo en locales comerciales y minimarkets que ofrecen pagos de entre 800 mil bolívares hasta más de un millón mensual.
Un gran número de jóvenes profesionales y estudiantes han indicado que la mejor opción es la de trabajar en tiendas de ropa o de alimentos donde ganan hasta 30 veces más de lo que podrían obtener trabajando en una institución pública y que por tal motivo abandonan sus carreras para buscar otras opciones.
Remesas para sobrevivir
Empleados que han dedicado varios años a instituciones públicas han expresado que ciertamente sus sueldos no cubren sus gastos personales y que mucho menos les permiten mantener a sus familias y que la única razón por la que no han abandonado sus sitios de trabajo es el compromiso que sienten con el mismo y que han logrado sobrevivir gracias a sus familiares que se encuentran en el extranjero y que les proporcionan el dinero necesario para sobrellevar la crisis actual.