Siguen encontrando cadáveres baleados en las trochas que conducen a Colombia

Autoridades responsabilizan a grupos paramilitares que luchan por el dominio de decenas de pasos ilegales, que entre Venezuela y Colombia, existen en las zonas de San Antonio del Táchira y Ureña, con un gran flujo de contrabando y otras actividades al margen de la ley

El cadáver de un “maletero”, fue encontrado en la trocha “El Ávila” cerca de Escobal, en territorio colombiano

Al Menos dos personas fueron reportadas como fallecidas el pasado fin de semana en la zona de frontera, colombo venezolana, esta vez en territorio colombiano, como consecuencia del enfrentamiento entre grupos irregulares, que  a sangre y fuego pretenden lograr el control de la zona, donde actividades de diversos tipos, la mayoría de ellas al margen de la ley,  generan fuertes sumas de dinero.

Autoridades policiales del vecino país informaron sobre dos muertes ocurridas en trochas que desde la población de Ureña conducen al Norte de Santander, donde fueron encontrados los cadáveres baleados de dos hombres, no identificados,  que se presume resultaron víctimas de la

espiral de terror y violencia que a diario se vive en la zona,

En horas de las mañana del domingo fue encontrados en el lado colombiano, concretamente en la trocha conocida como “El Ávila”,  que conduce a Escobal, el cadáver de un  joven que no portaba documentos de ningún tipo, por lo que permanece en  el instituto de Medicina Forense de Cúcuta como desconocido. Tan solo se sabe que vestía una indumentaria de tipo deportivo y tenía un nombre tatuado en un brazo, elementos que serán utilizados de referencia para una eventual identificación

Se presume que la víctima es un “maletero” que se dedicaba al transporte de mercancía entre ambos países y que formaba parte un grupo que a eso de las tres de la madrugada del domingo transitaba por la referida trocha, procedentes de Ureña y fueron atacados por un grupo de hombres fuertemente armados, que les dispararon, provocando una estampida y el abandono de la mercancía. Todos pudieron correr, con la sola excepción del desconocido que recibió un tiro en la cabeza y quedó  muerto en la trocha.

Dicen las victimas que fueron atacadas  por un grupo de hombres que portaban armas  largas, chalecos,  arnés, vestían completamente de negro y  cubrían sus rostros con capuchas. Se responsabiliza a este grupo de cometer una gran cantidad de homicidios a ambos lados de la frontera, algunos por venganza, rivalidad entre bandas y por no dejarse extorsionar. “En los últimos días les han  dado duro a los gasolineros”,  dijo más adelante el informante.

El  otro  cadáver fue encontrado en una trocha que desemboca en el barrio Nuevo, en Escobal. De este caso no se revelaron detalles, tan solo que la víctima presentaba heridas de arma de fuego. Vecinos manifestaron que en la madrugada escucharon varios disparos, pero como siempre ocurre, nadie salió a averiguar. Fue en la mañana, cuando se encontraron con el cadáver y dieron aviso a la policía.

Estas escenas se repiten a diario a ambos lados de la frontera, en tronchas de en San Antonio del Táchira como de Ureña y en la parte colombiana en diversos sectores de Cúcuta y La Parada. El coronel José Luis Palomino,  director de la Policía Metropolitana, dijo que en esta situación están involucrados  grupos paramilitares, entre los cuales mencionó a “Los Botas de Caucho” y  “La Lucha”, entre otros que por cuestiones territoriales mantienen una terrible y sangrienta guerra con saldo de decenas de fallecidos. La pugna se debe a la gran cantidad de dinero que se mueven a través de grandes y turbios negocios.  Así mismo, el alto oficial, involucra a un grupo que identifica como  “Colectivos venezolanos”, que operan en la trocha conocida como “La Gusanera”.

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