Pero ¿Qué no ha aumentado? pregunta un transportista. Un cambio de aceite sale en 700 mil bolívares, los cauchos pasan los tres millones. De acuerdo a cifras del Sindicato, los trabajadores del volante deberían ganar 1 millón 200 mil y apenas cobran 700 mil al día. No les alcanza para nada
María Gabriela Danieri
maria.danieri@diariodelosandes.com
A principios del mes, comenzaron a correr rumores de un posible aumento de las tarifas en las distintas líneas de transporte público del estado Trujillo. Todo a raíz de los incrementos de los insumos para el mantenimiento y reparación de vehículos, el ajuste salarial decretado por el gobierno y los precios inalcanzables de los alimentos. En resumen, a consecuencia de la inflación. Diario de los Andes consultó al presidente del Sindicato de Transporte, Douglas Vielma, quien explicó que el sector se encuentra en discusión de un ajuste del pasaje. Sin embargo, aún no han establecido el porcentaje de esta medida.
Como ganado
Los representantes de las diferentes rutas tuvieron una primera reunión este martes y sostendrán una segunda el próximo viernes, en la cual esperan llegar a un monto y una fecha. Vielma manifestó que en reiteradas ocasiones se ha invitado a los gobiernos municipales y el regional, a estas mesas de trabajo, esto con el objetivo de llegar a un acuerdo, en el cual gane el usuario y el prestador de servicio, pues a su juicio el problema no es el monto del pasaje, sino que un día los trujillanos deban ser trasladados «como ganado» en camiones, por la falta de unidades.
El precio de los repuestos y los insumos para el mantenimiento de los vehículos aumentan diariamente y sin regulación gubernamental. Su petición es simple, si quieren una tarifa estable, deben garantizar los insumos regulados y para todos los trabajadores del volante. Actualmente, ninguno de los choferes gana lo suficiente para mantener su carro, su alimentación, salud o servicios. Vielma ejemplicó la situación con el caso de un conductor de la ruta Valera-Trujillo, quien debería obtener 1 millón 200 mil diario y apenas genera 700 mil. Esa cantidad sólo le sirve para un cambio de aceite, sin ponerse a pensar en otros gastos programados como los tacos de frenos, las válvulas o los cauchos.
100% para seguir igual
Aunque la autoridad no reveló de cuánto podría ser el aumento de la tarifa, en un recorrido por varias paradas en la ciudad de Valera, los directivos de algunas líneas asomaron que será del 100% sobre el monto actual. En ese sentido, en Valera se estima un pasaje a 2.000 Bs. y en rutas hacia otros municipios de 5.000 Bs. El ciudadano espera que la tarifa sea justa para ambas partes y clama la intervención del gobierno para solventar la crisis del sector.
Conductores
Francisco Núñez (Motatán): ¿Qué no aumenta? esa es la pregunta. A 200 mil está el aceite «regulado» pero no se consigue. Una harina sube de 16 mil a 28 mil. Imagínese, todo lo demás aumenta. El Sindicato dirá de cuánto es el aumento, pero será más del 100%.
Robert Morillo (Carvajal): Todavía no ha aumentado el pasaje, se mantiene en 2.500 y 3 mil bolívares. Pero no se sabe cuándo aumente, se informará al usuario en su momento. Hasta ahora seguimos trabajando.
Jean Briceño (La Puerta): La tarifa sigue igual, en 3.200 y 4.000, por el problema de la gasolina. Si aumenta el urbano, que estiman sea de 2.000, nosotros aumentaremos. Los piratas son los que cobran de 5 mil para arriba, pero los de la línea no.
Daniel Parra (Escuque): El pasaje se aumentó hace una semana a 3 mil bolívares. Todavía no se ha discutido un nuevo precio, pero seguramente será necesario, porque los insumos para los vehículos están muy caros.
Regulados a cuenta gotas
En la Selva de Cemento, los ciudadanos salen diariamente a trabajar y, en cualquier tiempo libre, cazan sus alimentos. Claro, no como sus antepasados, con arco y flecha, sino con su terminal de cédula y mucha paciencia. En la mañana de ayer, se observaron algunas colas en establecimientos pequeños, donde había llegado harina de maíz precocido. Dos paquetes por persona, que no es mucho, pero ayudan a palear la necesidad. Esta se debe a los pocos comercios que han ofrecido productos regulados esta semana.
El efectivo restringido
Poco efectivo para los trujillanos. Las entidades bancarias, diariamente, lucen abarrotadas de personas a la espera de recibir 30 mil bolívares de su dinero. Algunas entidades ofrecen 100 mil, pero solamente con la aprobación de la gerencia. Situación que favorece a unos pocos. El resto debe hacer fila para adquirir algunos billetes para suplir sus necesidades de pasaje. Imagínese cuántos días debe acudir un ciudadano al banco si debe viajar a Caracas desde el terminal de pasajeros, pues el pasaje para ese destino supera los 300 mil bolívares.
Manteniemiento a la plaza
Era justo y necesario. La nueva directiva del Departamento de Saneamiento Ambiental de la Alcaldía de Valera comenzó la limpieza de la plaza Bolívar de la ciudad. Los obreros quitaron la maleza de las jardineras, devolvieron la vida a los apagados arbustos y lavaron la estatua de Bolívar. Igualmente, recogieron los desechos desperdigados en el suelo. Su objetivo es darle una nueva cara y devolver a los valeranos este importante espacio de encuentro.
Huele muy mal
La comunidad de San José, de Valera, está cansada de la desidia gubernamental. Necesitan que recojan los desechos, pues el aseo urbano tiene 6 meses sin pasar. En la fotografía de Henner Vieras se muestra cómo algunos habitantes, justamente molestos, decidieron trancar el paso con las bolsas de basura.