Se agudiza crisis por escasez de agua en Betijoque

Los constantes cortes de electricidad ocasionan también fallas en el acueducto de Betijoque.

 

Eduardo Viloria/DLA.-Los vecinos de las principales parroquias de Betijoque, Los Cedros, Betijoque y la Pueblita, se quejan de las constantes  fallas de agua  en sus hogares, motivado mas que todo a los cortes del  fluido eléctrico en el poblado y en el Acueducto la Amarrilla, pues si no hay electricidad no funcionan las bombas del mencionado acueducto, no permitiendo  que el preciado liquido llegue a los estanques principales ubicados en Betijoque.

Existen urbanizaciones, desarrollo habitacionales y lugares donde tienen más de 15 días sin agua, siendo la constante en casi todos estos urbanismos, donde hay la queja, “no tenemos agua hace 15, o hace 12 días ”; no teniendo la municipalidad una alternativa para resolver la problemática que sería repartir agua a través de camiones cisternas, estando un colectivo que le falta el agua a expensas de los manantiales naturales, El Pocito o La Milagrosa, donde las colas para acumular un garrafón no cesan, observándose que ha disminuido la presión del chorro surtidor, lo que también preocupa a los vecinos.

 

Agua de los manantiales naturales.

 

La basura

Otro de los problemas que también castiga a los rangelianos es la ausencia del Camión del aseo urbano, pues el servicio tiene en ciertos lugares ya para ocho meses que no se presta, en otros llega a seis meses, sin embargo lo cierto es que no hay camión de Aseo urbano que permita recolectar los desechos sólidos de los hogares de los rangelianos, lo que constituye también una de las problemáticas no tolerables, mas en estos tiempos de Pandemia  donde el aseo del hogar debe ser la primera prioridad.

En torno a la escasez de gas para uso domestico insistió Humberto González, de la Urbanización Luis Mario Madriz, sobre  los problemas que confrontan en el señalado desarrollo habitacional, por el humo en el ambiente y en los hogares, pues el gas para uso domestico no volvió más nunca, viéndose en la necesidad  los vecinos de utilizar leña para  encender las cocinas y preparar los alimentos.

 

 

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