Salud, unión y el pan de cada día: anhelos de las madres

Foto referencial

 

Este 9 de mayo, sería el segundo Día de las Madres que se viva en pandemia en Venezuela. Muchas madres han partido al cielo por causa del Covid, otras se han ido del país o a ciudades más grandes en busca de mejores oportunidades, mientras las abuelas se han convertido nuevamente en madres y ahora cuidan de sus nietos.

Tres panoramas de madres venezolanas se siguen viendo afectados por la economía, los servicios básicos como el agua y el gas y los quebrantos de salud; es por eso que la mayoría coincide en sus anhelos: salud, unión y el pan de cada día. “Sólo eso basta”, replica María Torres, como resignada, como acostumbrada; cabizbaja.

Las madres son luchadoras, amorosas, comprometidas y sobretodo, atentas con sus hijos y demás familias. “Pocas recibiremos obsequios materiales porque este día pasó de ser comercial a un día donde simplemente se agradece, se agradece la vida, la compañía y el alimento”, indica Digna Fernández, madre e hija.

Efectivamente, regalar un obsequio este Día de las Madres, es casi imposible, si sólo se cuenta con un sueldo mínimo. Un perfume, una blusa, un jean o unos zapatos pueden costar entre 20 y 50 dólares, aunque existen promociones en maquillaje, dulces o pasteles entre 5 y 10 $ y, esto último, aliviará la conciencia de muchos.

En el sondeo del equipo de Diario de Los Andes, también se constató que ya los hijos por el poco poder adquisitivo y por la pandemia, evitan sacar a pasear, almorzar o cenar a las madres del hogar, pero algunos sí planificaron un pequeño compartir familiar.

Por lo demás, las madres trujillanas esperan que la realidad de Venezuela cambie para el próximo año y que este día se pueda conmemorar con reencuentro y obsequios; sin temor a enfermedades o a otras carencias.

 

El deseo de una madre

María Mercedes Mejía

“Este día pido a Dios salud para mi madres, hermanas, hermanos e hijo, el cual siempre me da lecciones de vida. Por lo demás debemos pedir que se acabe esta pandemia y que la misma nos sirva para valorar que existe un Dios, la unión familiar y la vida tan preciada. Para mi hijo solo pido que pueda tener una Venezuela como la que yo tuve y buena educación”.

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