Un muchacho recibió la visita de un vecino el martes a las 11:30 am, éste salió y se fue junto a su amigo. Sus familiares no mostraron preocupación porque haya salido, ya que no era un joven de andar mucho en la calle, presumieron volvería pronto. Pero las alarmas se encendieron en su núcleo familiar cuando ya era de noche y no llegaba.
Al día siguiente, cerca de las 2:00 pm seguía sin aparecer; su madre fue a buscarlo, no sin antes acudir a la Estación Policial de Motatán e informar que se adentraría a una zona enmontada para buscar a su muchacho, así los efectivos no pensarían que estaría en algo ilícito. El temor empezó a apoderarse de su progenitora, esta se temía lo peor.
Junto a dos de sus hijos y vecinos de la zona, su madre empezó la búsqueda. Tras par de horas de intensa exploración por la zona, hallaron el cuerpo sin vida y en descomposición de José Antonio Perdomo García (19), éste recibió tres disparos con arma de fuego por parte de sus homicidas.
El Eje de Homicidios del Cicpc Subdelegación Valera arribó al lugar cerca de las 5:00 pm a realizar la recolección de evidencias y practicar el levantamiento del cuerpo, llevado a cabo por el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) quien lo trasladó a la morgue del Hospital Central de Valera.
El joven fallecido residía en el sector Los Olivos, parroquia Jalisco del municipio Motatán, cerca del lugar donde fue hallado. José Antonio trabajaba en el mantenimiento de zonas enmontadas, tales como patios y parcelas; dejó dos hijas en orfandad, una de tres años y otra de apenas seis meses. Era el último de cuatro hermanos.