El sonido de la música y la ingesta de alcohol, eran evidentes la noche del sábado; trabajadores, jóvenes y demás personas, se preparaban para compartir tragos y conversar en los diversos establecimientos licoreros del sector Campo Estrella de Monay, parroquia La Paz del municipio Pampán. Cerca de las 8:30 pm, Ramón Antonio Carrillo González (41), se alistó y salió de su casa para disfrutar de la vida nocturna, luego de una semana agitada en el trabajo.
A Ramón Antonio le gustaba estar solo, concurría bares y tascas los fines de semana. Pero esa noche, luego de tomar algunos tragos y bailar, decidió volver a casa, ya en horas de la madrugada. Éste siempre cogía un taxi para llegar a su hogar, pero esa noche tomó la fatídica decisión de caminar por las oscuras calles de aquel sector.
Cerca de su casa, cuando ya estaba a punto de llegar; Carrillo González fue interceptado por sujetos desconocidos a bordo de una motocicleta, quienes sin mediar palabras y aprovechando su estado de ebriedad, desenfundaron sus armas de fuego y le atinaron múltiples detonaciones. Los asesinos escaparon sin dejar rastros, no hubo testigos que hayan presenciado el homicidio. Se desconoce la hora exacta del asesinato, pero su cuerpo fue hallado por los vecinos, aproximadamente a las 9:00 am del domingo.
La policía llegó a la escena del crimen, previa llamada de los vecinos, para custodiarla; a esperas de que arribara el Eje de Homicidios del Cicpc a realizar la respectiva recolección de evidencias en el lugar. El cuerpo fue levantado y trasladado por el Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) a la morgue del Hospital “Dr. Pedro Emilio Carrillo” de Valera, donde sus familiares esperaban el resultado de la autopsia para retirar el cadáver de su consanguíneo.
Estuvo preso
Ramón Antonio Carrillo González (41) presentó un antecedente policial por delito de extorsión (04-01-2016) ante la Subdelegación Valera, crimen por el que estuvo encarcelado cierto tiempo, a éste le concedieron la libertad condicional bajo un estricto régimen de presentación. “Él se presentaba por la extorsión, hasta ahora desconocemos quién pudo haberlo asesinado. Esperemos se haga justicia”, enfatizó una hermana del occiso.
Agricultor
Carrillo González vivió toda su vida en Caracas, pero hace ocho meses se había mudado al estado Trujillo. Éste dejó ocho hijos y era el tercero de cinco hermanos. Se dedicaba a la agricultura en una parcela que trabajaba junto a sus tíos. “Solamente el que lo mató sabe por qué lo hizo”, comentó su hermana.