Redacción Internacional, 13 oct (EFE).- La segunda oleada del coronavirus golpea con fuerza en varios países europeos, como Rusia, donde se registra un nuevo récord de contagios, mientras Italia pone en marcha más medidas restrictivas y Francia se dispone a adoptar otras nuevas.
Además, el Consejo de la Unión Europea adoptó este martes una «recomendación» para que los Estados miembros basen sus restricciones a los viajes dentro de la UE en función de la situación epidemiológica que incluye un código de colores por zonas. «Esta recomendación tiene como objetivo evitar la fragmentación y la disrupción y aumentar la transparencia y la previsibilidad para los ciudadanos y las empresas», indicó el Consejo en un comunicado.
ALEMANIA
La cifra de nuevos contagios diarios rebasó este martes los 4.000 casos en Alemania, en medio de un fuerte debate por la prohibición de algunos poderes regionales a los viajeros de zonas de riesgo del país de pernoctar en su territorio. El Instituto Robert Koch (RKI), competente en la materia en Alemania, notificó hoy 4.122 nuevos casos de Sars-CoV-2. Se observó un claro repunte respecto a los 2.467 del lunes, aunque esta evolución se considera normal, dado que en fin de semana se ralentiza la compilación de datos en algunas regiones.
El número de víctimas mortales en 24 horas fue de 13, lo que sitúa la cifra de fallecidos con o por Sars-CoV-2 en Alemania desde el inicio de la pandemia en 9.634, con un total de 329.453 infecciones, de las cuales 279.300 son pacientes recuperados. El factor «R» de reproducción se sitúa en 1,29 -es decir, cada contagiado transmite el virus a una media de 1,29 personas-. La aceleración de los contagios registrada la semana pasada ha derivado en nuevas restricciones en las regiones de mayor incidencia. El sábado se superaron los 4.700 contagios en 24 horas, el máximo diario desde mediados de abril, y se temía una progresión rápida hacia el pico alcanzado a finales de marzo, con 6.000 contagios diarios.
RUSIA
Rusia ha registrado un nuevo récord de contagios diarios de COVID-19 con 13.868 casos en las últimas 24 horas, en las que se produjeron 244 fallecimientos, según informaron hoy las autoridades sanitarias del país. Pese al gran aumento del número de casos en las últimas semanas, el Gobierno ruso se resiste a adoptar medidas estrictas a nivel nacional como la de confinar a la población o de paralizar determinadas actividades económicas.
Moscú, donde se han cerrado las escuelas, a los enfermos crónicos y mayores de 65 años se les ha recomendado permanecer en sus casas y se promueve el teletrabajo, sigue siendo el principal foco infeccioso del país con un total 339.431 positivos por coronavirus y 4.618 fallecimientos por COVID-19 desde el comienzo de la epidemia.
En la última jornada en la capital rusa se registraron 4.618 casos de COVI-D19 y 58 decesos. La situación epidémica ha empeorado en San Petersburgo, la segunda ciudad de Rusia, que en las últimas 24 horas registró 557 contagios, nuevo récord de casos diarios, y 34 decesos.
ITALIA
Los nuevos casos de coronavirus en Italia, cerca de 5.500 diarios, empiezan a preocupar por lo que el Gobierno decretó algunas nuevas medidas como el cierre de restaurantes a medianoche, y a las 21.00 horas en caso de que no haya servicio en mesa, sobre todo dirigidas a limitar las aglomeraciones fuera de los locales, consideradas uno de los mayores focos de contagio. La medida más sorprendente y la que más reacciones negativas está produciendo es la prohibición de los clásicos «partidillos» de deportes de contacto, como el fútbol o el baloncesto, entre amigos durante la semana.
Las medidas se incluyen en un nuevo Decreto de la Presidencia del Consejo de Ministros (Dpcm) firmado esta madrugada y que tiene una validez de 30 días. Por el momento, el Gobierno de Giuseppe Conte ha reiterado que se excluye cualquier tipo de confinamiento nacional como el de la pasada primavera.
Estará prohibido además celebrar fiestas privadas en lugares públicos y discotecas, tanto al aire libre como en interior. Sí se pueden celebrar fiestas como bautizos o bodas en restaurantes, así como funerales, pero con no más de 30 personas, mientras hasta ahora no había límite.
POLONIA
El primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, ha quedado en cuarentena tras haber estado en contacto con una persona que dio positivo en Sars-CoV-2. Morawiecki indicó en su cuenta de Facebook que seguirá al frente de sus tareas de gobierno y que se mantiene en directo contacto con sus colaboradores y miembros de su equipo.
En las últimas 24 horas se registraron 5.068 nuevos contagios, informaron las autoridades sanitarias del país. El sábado se notificaron 5.300 casos de Sars-CoV-2, la más alta marca en un día en toda la pandemia y el cuarto máximo diario consecutivo. En total se han verificado en el país 135.278 contagios y 3.101 muertos con o por el Sars-CoV-2, de los cuales 63 en las últimas 24 horas. Las cifras de la última semana indican una rápida aceleración.
FRANCIA
El presidente francés, Emmanuel Macron, prepara este martes con su Gobierno nuevas medidas restrictivas para contener la propagación del coronavirus entre las que puede estar algún tipo de toque de queda nocturno en las zonas más afectadas. Macron intervendrá en televisión a las 20.00 locales (18.00 GMT), en el horario de máxima audiencia.
La ministra de Vivienda, Emmanuelle Wargon, interrogada esta mañana, dejó muy abierto el abanico de posibles medidas y recordó que el primer ministro, Jean Castex, el lunes indicó que había que hacer lo posible para evitar una vuelta a un confinamiento general. Castex, insistió en que «no se puede excluir nada cuando se ve la situación de los hospitales» al ser preguntado sobre la posibilidad de imponer confinamientos locales. Otra posible medida -filtrada inicialmente por «Le Point» y confirmada por otros medios- es un toque de queda que impediría salir a la calle por la noche y que se impondría en algunas de las áreas urbanas que se encuentran en alerta máxima.
Este lunes, la agencia de salud pública comunicó 8.505 nuevos contagios, una cifra mucho más baja que en los días precedentes, pero que no sorprende al corresponder al fin de semana, cuando se hacen muchos menos test.
REPÚBLICA CHECA
De escaparate de Europa en la lucha contra la pandemia del coronavirus, con tasas de contagios insignificantes en primavera, la República Checa ha pasado a encabezar en otoño el ránking de infecciones, algo que los expertos atribuyen a la imprevisión y populismo de los políticos.
Con una tasa de contagios acumulados en las dos últimas semanas de 493,1 por 100.000 habitantes el país centroeuropeo se encuentra muy por delante de Bélgica (402,5) y España (308,1). A los responsables quita el sueño que el sistema hospitalario pueda colapsar en las próximas semanas con enfermos de COVID-19, ya que de los cerca de 60.000 positivos actuales, más de 2.100 están hospitalizados -esta cifra se ha doblado en lo que va de mes-, con 438 en estado grave.
R.UNIDO
Los asesores científicos del Gobierno británico cuestionaron la estrategia del primer ministro, Boris Johnson, contra la pandemia y recomendaron el pasado mes un confinamiento «corto» nacional para frenar el virus, según documentos oficiales filtrados este martes por la prensa.
Hace tres semanas se recomendó al líder conservador la introducción «de manera inmediata» de duras restricciones nacionales para poder controlar la pandemia, entre ellas un breve confinamiento nacional de entre dos y tres semanas para «romper el circuito» de propagación del coronavirus.
En lugar de seguir esos consejos, Johnson optó por medidas más laxas, como la llamada «regla de los seis» – que prohíbe encuentros sociales de más de seis personas – y el adelantamiento de la hora de cierre de los pubs, presionado por su titular de Economía, Rishi Sunak, a fin de evitar un excesivo daño a la actividad económica.
ESPAÑA
En España, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, aseguró que no se dan las circunstancias para levantar el estado de alarma vigente desde el viernes pasado en la Comunidad de Madrid, como piden las autoridades de esta región, porque tendría que bajar la incidencia «muchísimo más», por debajo de 200 casos por 100.000 habitantes, «idealmente alrededor» de 100. El ministro insistió en justificar el estado de alarma para dar cobertura jurídica y certeza a las medidas de confinamiento perimetral de nueve municipios de la comunidad, entre ellos la capital, con más de 4,5 millones de habitantes.
Según los últimos datos, Madrid sigue con una incidencia acumulada por encima de 500 casos por 100.000 habitantes, en torno al 20 % de positividad en las pruebas diagnósticas y 40 % de ocupación de UCI, dijo el ministro.