Quito, 1 abr (EFE).- El Ministerio ecuatoriano de Ambiente informó este jueves de la recolección de 2,1 toneladas de basura en un segundo viaje de limpieza costera del archipiélago de Galápagos, que se suman a las 2,5 toneladas recogidas en la primera jornada de limpieza marina desarrollada en febrero pasado.
Detalló que durante una semana, 18 personas entre guardaparques, voluntarios, pescadores junto a miembros de la organización Conservación Internacional con el apoyo de Fundación Coca-Cola de Ecuador, realizaron el segundo viaje de limpieza por sitios lejanos al norte del archipiélago, específicamente por las islas Genovesa, Pinta y Santiago.
En ese viaje recolectaron las 2,1 toneladas de basura marina arrastrada por la corriente e identificada en doce puntos específicos.
Con un recorrido de 22 kilómetros de costa, la campaña de limpieza se efectuó en dos jornadas darías que consistían en la recaudación, clasificación y el registro de los desechos.
Esta información permitirá alimentar la base de datos del Programa de Limpieza Costera y Gestión de la Basura Marina de la Dirección del Parque Nacional Galápagos del Ministerio del Ambiente y Agua, indicó el Ministerio en un comunicado.
Galo Quezada, guardaparque responsable de esta actividad, mencionó que para seleccionar los sitios de intervención se basaron en información histórica disponible.
«La evidencia que se ha recolectado en los últimos años, nos permite conocer qué sitios son mayormente impactados por la presencia de basura oceánica», comentó.
La actividad culminó con el desembarque en Santa Cruz de 277 sacos de basura, que incluían 18.177 botellas plásticas de diferentes procedencias, uno de los materiales contaminantes que más abunda en esta y otras jornadas de limpieza costera.
Toda la basura previamente clasificada será entregada al Gobierno Autónomo Descentralizado Municipal de Santa Cruz para su disposición final.
La estrategia de lucha contra el plástico contempla un tercer viaje, a finales de abril, a sitios lejanos, con el objetivo de minimizar los impactos directos en las costas de los sitios remotos del archipiélago.
«Ecuador tiene una posición firme contra la basura marina al ser uno de los problemas ambientales más urgentes en los últimos años, tanto a nivel nacional como internacional y trabaja ya varios años y desde varios frentes», dijo el ministro del Ambiente y Agua, Marcelo Mata.
Las actividades de limpieza costera permiten reducir significativamente la acumulación de basura flotante en las zonas costeras y submareales, lo que incide directamente en la protección de la fauna marina, recordó el Ministerio.
El archipiélago de Galápagos está situado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas y fue declarado en 1978 como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco.