La sede del Consejo Legislativo del estado Trujillo (Clet) fue el escenario donde los defensores del legado de Hugo Chávez se congregaron la mañana de ayer para presenciar la juramentación de Henry Rangel Silva, como gobernador reelecto para un segundo período en la entidad. El acto contó con la presencia de Delcy Rodríguez, presidenta de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
Con la mano izquierda en alto, la derecha posada sobre la Constitución de la República y frente a Rodríguez y Jorge Antequera, presidente del Clet, Rangel manifestó: “juro para que la revolución bolivariana sea la mejor del mundo”. Prometió además que hará todo lo posible para consolidar el Trujillo potencia.
Acompañado también en la tarima por Hugbel Roa, ministro de Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, los 26 constituyentistas del estado, la primera combatiente Jacqueline Peñaloza y parte del Ejecutivo regional, el Premier inició su discurso tras citar un pensamiento de Mahatma Gandhi para exhortar a la revisión y rectificación de la nueva gestión de gobierno.
Retorno a las raíces
“Los revolucionarios debemos estar permanentemente creciendo, revisándonos, por eso Chávez nos regaló las tres R: revisión, rectificación y reimpulso”, expresó. De inmediato acotó que deben retornar a las raíces de la revolución bolivariana, a fin de que les dé la fortaleza necesaria para los tiempos y batallas electorales que se avecinan, “para luchar y vencer”.
Apoyo irrestricto
El mandatario regional felicitó a los trujillanos por triunfar en las luchas que les ha tocado como revolucionario y resaltó que hay un hombre al que se le han presentado las batallas más duras porque las circunstancias lo pusieron al frente de sacar adelante la causa revolucionaria, “Nicolás Maduro, quien recibió la tarea de las manos de un gigante, esté pueblo trujillano está con él y lo apoya de manera irrestricta”.
Plan de desarrollo
Rangel reiteró que la región cuenta con un Plan de Desarrollo 2016-2030 que no se trata de promesas, sino de compromisos viables y proyectos factibles en función de las potencialidades del estado, “soy visionario como lo era Chávez y por eso pensamos en el desarrollo de Trujillo para los próximos 15 años”.
Reveló además que en unos días los “gobernadores bolivarianos” sostendrán una reunión con el Presidente de la República, quien desde ya les pidió un inventario de 10 prioridades de cada estado, en el caso de Trujillo la lista contendrá proyectos en materia de energía eléctrica y transporte público, además abordará el tema de la Planta de Etanol, operatividad al 100% de Cemento Andino y el mejoramiento de la vialidad.
Venganza de la derecha
El Gobernador denunció que la derecha nacional e internacional se está vengando del pueblo por los resultados del pasado 15-O a través del alza del precios de los alimentos en la última semana, con el uso del “DólarToday guerimbero”. Informó que esta semana realizará una reunión con su equipo de trabajo para dar una batalla contra la especulación, usura y acaparamiento.
“Amor del comandante eterno”
Tras recordar que se crió en una hacienda de café en Santiago (municipio Trujillo) y se formó como militar en Caracas, el Gobernador aseguró que no dudó ni un segundo en regresar al estado cuando el fallecido presidente Chávez le encomendó la misión de guiar a Trujillo, “para darle a mi tierra lo que nunca le habían dado, el amor del comandante eterno”.
Delcy Rodríguez: no vamos a
permitir que sigan con altanerías
Luego de mencionar que el gran vencedor de los comicios regionales fue el mandatario nacional, quien le asestó un nocaut a Donald Trump, la presidenta de la ANC expresó que Rangel Silva no es cualquier gobernador, “fue premiado por el pueblo por su gestión”. Recordó que era uno de los hombres de confianza del fallecido presidente.
Rodríguez manifestó además que en la Constituyente están reflejados el espíritu de lucha de Fabricio Ojeda y las manos curativas del doctor José Gregorio Hernández. Advirtió a los cinco gobernadores de la oposición que deben presentarse ante la ANC para ser juramentados, “no vamos a permitir que sigan con altanerías diciendo que no lo van a hacer. Lo tienen que hacer, se lo estamos diciendo pausadamente”.