¿Qué hacemos Señor?: posible pregunta de los cristianos ante la grave situación de Venezuela | Por: Luis A. Villarreal P.

 

En realidad, la Semana Santa no se circunscribe sólo a unos días de asueto —turismo, placeres y desmanes, o celebraciones litúrgicas—. La Cuaresma señala un periodo de cuarenta días para la reflexión y el recogimiento. Ayunos y promesas de enmienda, debido a las actitudes y procederes equivocados, se hacen para consustanciarse con Dios; por la salvación de cada uno, del alma de cada quien. Lo que además permite participar de mejor manera en los actos memorativos de la pasión, crucifixión, muerte y resurrección de Jesús, y festejar la Pascua.

La Semana Mayor nos da la oportunidad de pensar también en la situación social y política de Venezuela, que muestra el daño que se ha hecho a millones de personas.

Se necesita entonces combinar la lucha y las convicciones religiosas para dar respuesta  a las necesidades materiales y espirituales básicas y a la dignidad que como seres humanos hemos de tener sin restricciones, en aras de la felicidad que es razón primordial de nuestra existencia.

Quien no esté en esta onda de pensamiento integral e inclusivo —sino por el contrario individualista o sectario— mal pudiera reconocerse como fiel seguidor del cristianismo, el gran movimiento histórico, social y político, que conocemos.

Ha sido instituido con las enseñanzas de Cristo para acercarse a Dios y alcanzar el mejor comportamiento humano, a través de la solidaridad y amor al prójimo; bajo los preceptos de libertad, igualdad y fraternidad, universales; en el deseo de promover y atesorar el conocimiento como don de revelación divina.

Debemos aprovechar al máximo esa energía cristiana, que tantos beneficios ha traído a la humanidad,  conquistando lo que deseamos para Venezuela. Sólo basta estar en ‘verdadera comunión’ con Cristo que se sacrificó por todos, y emular sus procedimientos de sinceridad y valentía.

En otro orden de exposición, haciendo seguimiento a las circunstancias y desempeños de los organismos opositores en sus tareas inherentes, nos corresponde comentar que según Dinorah Figuera, su presidenta, la AN 2015 tiene bajo control los activos retenidos en varios países, y están resguardados. Aunque se ha filtrado información de lo contrario, porque al parecer Miraflores ha venido disponiendo de los mismos en cantidades considerables.

La Plataforma Unitaria Democrática originaria [G4] se ha estado unificando en el exilio, incluyendo a personas de diversa condición política migratoria; con la finalidad de contribuir a la realización de las Primarias, y, sobre todo, de organizar la diáspora y su participación electoral.

Las juntas electorales estadales opositoras ya cuentan con sus integrantes, nombrados y dados a conocer por la Comisión Nacional de Primarias, según lo informó Jesús María Casal su presidente.

Instalada la Comisión Técnica del Consejo Nacional Electoral [CNE] y la Comisión Nacional de Primarias [CNP], se ha explicado que aun con la participación que ‘tendrá’ el Poder Electoral en la realización de Primarias se adoptarán medidas para proteger la identidad del elector y evitar una nueva ‘Lista Tascón’. Así lo aseveró Jesús María Casal.

No hay inhabilitaciones políticas para las Primarias. Todos tienen derecho a participar, como es el caso de Capriles y Guaidó. Más concretamente, Casal fue explícito al decir:

«En nuestro reglamento marco hemos declarado que estas inhabilitaciones no representan ninguna restricción. Serán los electores quienes deberán valorar estas situaciones y, si los electores deciden que una persona que ha sido víctima de estas inhabilitaciones debe ser el abanderado para la Presidencia de la República, será una decisión política que respetaremos».

Asimismo, enfatizó que: «Estamos trabajando para organizar una primaria que sea expresión de la libertad política y democrática, por los derechos de todos los venezolanos que le apuestan a un cambio político».

No obstante la recién oleada de corrupción que se ha puesto al descubierto; por lo expuesto, no hay sino razones para ser optimistas e ir precisando nuestra participación en el discernimiento de las propuestas que se han estado haciendo por parte de los aspirantes a la legitimación del liderazgo opositor, y también en los diversos debates que seguramente y sin excusas han de generarse.

 

 

 

 

 

.

Salir de la versión móvil