Integrantes de la llamada «resistencia G-8» se mantienen en los alrededores de la ULA Táchira protestando bajo la consigna «Maduro usurpador». Efectivos de Politáchira también están presente
Con una pancarta extendida a lo largo de la entrada a la Universidad de Los Andes, núcleo «Dr. Pedro Rincón Gutiérrez» que tiene escrito: «Maduro usurpador», estudiantes de dicha casa de estudios, pertenecientes a la llamada «resistencia G-8» mantienen una protesta en la avenida Universidad en la ciudad de San Cristóbal- estado Táchira.
Comenzaron trancando los alrededores de la ULA con una quema de cauchos y con sus rostros protegidos con máscaras de gas y franelas. Atravesaron ramas de árboles y un poste, y en los portones de la universidad colgaron dos pancartas con los mensajes: «La calle es nuestra. Me declaro en desobediencia civil. Art. 350», y «Si un militar mata a un manifestante es «uso desproporcionado de la fuerza». Si un manifestante lanza piedras ¿es terrorismo?».
Quienes tenían que transitar por el sector lo hacían caminando, personas de la tercera edad, jóvenes y padres con sus hijos aceleraban el paso mientras veían a los encapuchados con piedras en mano.
Pasadas las 10 de la mañana llegó un comando de las Fuerzas Armadas Especiales de la Policía Nacional Bolivariana -FAES- con armas largas, y los manifestantes se extendieron de brazos preguntando qué querían, los hombres se retiraron del lugar sin enfrentamiento.
Unos 20 minutos después llegaron funcionarios de la Policía del Táchira con equipos antimotín y motocicletas, retiraron postes y ramas de árboles, y a ratos encendían las motos y se acercaban a los manifestantes, quienes lanzaban piedras y les gritaban cobardes.
«Depende de la gente»
Aunque prefirió no dar su nombre por temor a represalias, uno de los manifestantes indicó que la idea es mantenerse protestando de manera indefinida, pero acotó que todo depende de lo que los ciudadanos digan y hagan, porque temen que el pueblo los deje solos.
Destacó que la Universidad de Los Andes no se arrodilla ante las pretensiones de ningún gobierno, y que por lo tanto no reconocen la reelección de Nicolás Maduro y exigen que se convoque a un proceso electoral transparente.
En el lugar se mantienen funcionarios y manifestantes, sin que se registre ningún enfrentamiento.