Gilcely Linares CNP 15.221
Caminar descalzo 4.5 kilómetros, sin importar lo caliente del pavimento, llevando la cruz a cuestas, además recibir alrededor de 300 latigazos, sin ningún tipo de protección, constantes escupitajos, maltratos e insultos forman parte del realismo escenificado por Alonso Crespo, quien interpreta a Jesucristo durante el emblemático viacrucis viviente de la parroquia Tres Esquinas en el municipio Trujillo.
Las llagas en los pies tardan unas dos semanas en sanar, al igual que los golpes en la espalda y lesiones dejadas en la cabeza por la corona de espinas, simulada con tallos de un árbol de naranjo. Desde 1990, impulsado por la participación activa de su familia en el evento cultural y religioso, Crespo se integra a la iniciativa.
En principio como uno de los infantes bendecidos por Jesús. Posteriormente al efectuar una promesa por la salud de su hermana y la propia toma el papel del hijo de Dios en el 2007, el ofrecimiento tenía un lapso de siete años, sin embargo, por circunstancias del destino y una bendición divina aún representa al personaje.
“Es un orgullo interpretar a Jesucristo, vivir siempre movido por la fe y devoción de sus últimos momentos, lo cual nos invita a valorar lo que tenemos y reflexionar sobre nuestro actuar”, dijo.
Al arribar este 2023 la edición comunitaria número 48 del acto alusivo a la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús de Nazareth, Crespo afirma que “es indescriptible lo que siento en mi corazón y espíritu al ser Jesús, hay alegría, confort y regocijo. Él me da fuerzas para avanzar en el tortuoso recorrido, voy descalzo, recibiendo latigazos y una serie de humillaciones tanto físicas como verbales, pero no importa, lo soporto”.
Los antecesores en el personaje de Jesús, cada uno de ellos iluminados en la esperanza y la posibilidad del renacer, pese a las adversidades, fueron Alirio Montilla (1975), Freddy Crespo (1976-1989) y Freddy Sierrealta (1990-2006).
Nadiuska Núñez, la Virgen María, enfatiza que asume su papel con inmensa fe, incluso llora de verdad, al pensar en el sufrimiento pasado por nuestro Señor, con la finalidad de salvar al mundo.
Orgullo patrimonial
Para Ender Villegas, quien lleva 40 años involucrado asertivamente en la escenificación del Calvario, “es fundamental mantener las tradiciones, apostar por el rescate de valores y enseñárselos a las nuevas generaciones”.
Al respecto el intérprete de Pedro, Benito Villegas, alega ser “un amante de la cultura, por ello es satisfactorio plasmar, con responsabilidad, ahínco y mucha fe, la angustia de Jesús”.
Benito Villegas confiesa que “comencé en el viacrucis viviente por curiosidad, pero al tener tan extraordinaria experiencia mi participación se convirtió en esperanza, devoción y compromiso”.
Coinciden que es un orgullo para los habitantes de Tres Esquinas que el viacrucis sea patrimonio municipal y regional, sinónimo de unidad, hermandad, respeto, diversidad y trabajo en equipo. Destacan que anhelan la declaratoria respectiva con rango nacional.
Formación de relevo
Entre el 2000 y 2007, Ramón Pineda impulsó la realización del viacrucis infantil en la populosa parroquia, después de cumplirse el acostumbrado de adultos. La práctica abrió camino para que a partir del 2017 fuese retomada la formación de la generación de relevo del viacrucis viviente.
En tal sentido, Ender Villegas instruye en la Unidad Educativa “Andrés Lomelli Rosario” a 25 integrantes del “Teatro Bíblico”, quienes, con plena convicción de los valores cristianos, dan vida a diversos personajes. La actividad infantil tiene por ruta, días antes de Semana Santa, a los sectores I y II.
Arraigo familiar
“Crecí en el mundo católico, toda mi familia guarda relación con uno de los viacrucis vivientes más antiguos de la entidad. A los 13 años de edad me sumé a la causa, hoy con 38 sigo involucrado, inspirado por la fe, promesas, fervor, incluso la necesidad de comprender e internalizar la última etapa de Jesús, en procura de darnos algo mejor”, expresa Sergio “Junior” Morón.
Ejemplo de conservar la tradición en letra viva es la familia Morón, a mediados de los 70 ya participaban, ahora los más pequeños lo hacen, entre ellos Luciano Morón, quien en dos oportunidades ha integrado el elenco.
Con inocencia resalta la vinculación de su grupo filial en la recreación del sufrimiento de Jesús para alcanzar la vida eterna, e invita a acercarse a Dios, a la Iglesia, en busca de espiritualidad y júbilo.
Otras familias con asistencia constante de varias generaciones son los Pacheco, Pineda, Villegas Gutiérrez y Villegas Godoy. Algo similar ocurre con la elaboración de los altares en casi cinco décadas, bajo la responsabilidad de los González, Raga, Montilla, Terán, Azuaje y Milla.
Reseña histórica
Era 1974 cuando de una tertulia entre jóvenes en la avenida principal del sector II nació el interés de consolidar un proyecto a favor de la comunidad, sin imaginar el alcance y trascendencia de sus ideas. El profesor Hugo Vásquez les sugirió encarnar un viacrucis e involucrar a la mayor cantidad de personas.
Un año después, 1975, se constituyó el Grupo Cultural y Deportivo “Unión y Fuerza”, posteriormente el Teatro “Estudio 3”, más reciente la Asociación Civil Club Cultural “Unión y Fuerza”. Cada plataforma ha sido clave en la profundización de la fe, aunado en avivar el arraigo popular.
La primera instancia en respaldar la propuesta fue la Dirección General de Prevención del Delito, designando al maestro de teatro Federico Vargas para capacitar a los actores.
Edición 2023
En tal oportunidad los personajes principales están a cargo de Alonso Crespo (Jesús de Nazareth), Nadiuska Núñez (la Virgen María), Sergio “Junior” Morón (Poncio Pilatos), Jesús López (Herodes), Darwin Perdomo y Orlado Araujo (Ladrones), Ender Villegas (Centurión), del mismo modo, Carlos Ruiz, Ramiro García, Virgilio Castellanos, Raúl Ruíz, Tulio López y Jorge Barrios interpretan a los Sumos Sacerdotes.
Otros encargados de las simbolizaciones son Jesús Lemus (Judas Iscariote), Ismael Montilla (Himineo), Guadalupe Materano (La Verónica), Darwin Montilla (Barrabás), Benito Villegas (Pedro), Neidy Vásquez (Claudia Prócula, esposa de Pilatos), Heismaily Sequera (Herodías) y Karina Vásquez (Salomé). Eglys Montilla es el encargado de los efectos especiales.
En total las caracterizaciones son asumidas por unas 120 personas, quienes ensayan de enero a la Semana Mayor un promedio de 110 horas. Estiman contar con la presencia de unos 2000 feligreses, entre trujillanos y visitantes. El recorrido inicia a la 1 p.m. del Viernes Santos en La Redoma del sector I, pasando los sectores I, II, III, “Alí Primera” hasta llegar al Polideportivo, donde a las 3 p.m. es la crucifixión.
La programación cuenta con el respaldo de Jesús Ávila, párroco del Templo “San José Obrero”. Este año las alcaldías de Trujillo y Pampanito, la Gobernación, a la vez el parlamento regional, la Corporación Trujillana de Turismo, el Servicio Administrativo de Publicidad Socialista del estado Trujillo (Sapset), el Instituto Trujillano de la Juventud, la Distribuidora Trujillana de Alimentos (Distal), el Instituto de la Cultura y las Artes del estado Trujillo (Inacet) junto al coronel Adelis Yépez han otorgado un apoyo irrestricto a la magna puesta en escena.