Eduardo Viloria
DLA
El domingo 25 de noviembre se están cumpliendo 46 años de haber entrado a prestar servicio al conglomerado en general, especialmente al municipio Rafael Rangel, el Hospital María Aracelis Álvarez, orgullo de la tierra cuna de Santos y Sabios, para lo cual el comité organizador de las actividades especiales conjuntamente con la dirección del Centro Asistencial, han organizado un programa especial que se inicia ese lunes 19 a las 8 de la mañana, con la concentración de un grupo de empleados del Hospital que se trasladarán a la plaza Bolívar de Betijoque, donde ofrecerán un ramo de flores naturales al padre de la patria y habrá palabras del director del nosocomio doctor Homero Alurralde.
Después, será la apertura de las actividades aniversario en el Hospital, con la realización de actividades culturales e inicio de unas jornadas quirúrgicas.
El martes 20, las actividades recreativas estarán dirigidas a los más pequeños con castillos inflables y otras recreaciones para los niños, igualmente habrá continuación de las jornadas quirúrgicas.
El miércoles 21, se desarrollará un taller de formación académica y el jueves 22 será la continuación de las jornadas quirúrgicas, se practicarán citologías a personas previamente escogidas, dándose también inicio a los juegos deportivos del centro asistencial.
El viernes 23 a las 8 de la mañana le toca oficiar la misa aniversario al presbítero José Humberto Quintero, continuación de las actividades deportivas, entonación del cumpleaños feliz y compartir de un grupo de trabajadores en las rurales El Socorro.
El sábado 24 será la culminación de los juegos deportivos premiación y suculento sancocho, señalando Meilín Bastidas una de las organizadoras de las actividades, que habrá para todos.
La construcción del Hospital María Aracelis Álvarez se debe al filántropo Don Rafael Álvarez, a quien los organizadores o integrantes del comité aniversario están pidiendo luz de descanso eterno para el alma de este señor, que solo pidió que a la obra que construía y que donaba a su pueblo, el de Betijoque, se le pusiera el nombre de su progenitora, María Aracelis Álvarez.
El Hospital María Aracelis Álvarez fue inaugurado por el presidente de la República de aquel entonces doctor Rafael Caldera, todo a solicitud del filántropo que construyó de su peculio la obra, Don Rafael Álvarez