La escasez de los productos de primera necesidad mantiene desesperada a la comunidad. La gente hace sus colas, porque la escasez va desde los productos de primera necesidad y también los detergentes. De esto último, tampoco importa la marca, pero si se busca causarle el menor daño a las prendas de vestir, por los costos actuales tanto para: hombres, como para damas y no se diga de: niñas o niños.
El caso es que al hacer las colas en los establecimientos comerciales no falta la viveza criolla, el que se quiere “colear” y hasta el que finge algún impedimento físico.
Pero en la “Viña del Señor” hay de todo “Como en Botica” y es el caso de los funcionarios uniformados que ayudan a poner orden en las colas que muchas veces y quizá producto del cansancio, algunos de estos presuntamente maltratan verbalmente a los consumidores, sin importar que este sea dama o persona de la tercera edad. Al ocurrir esto aquí, quizá en otro lugar del país, injustamente alguno de sus familiares está recibiendo la misma dosis, por aquello de que aquí todo se paga. No obstante lo anterior, el llamado es a los superiores de los cuerpos de seguridad que son enviados para “ayudar en el control de las colas” con el fin que instruyan a sus subalternos, para que estos dispensen un mejor trato a los consumidores y por igual el público que nos encomendó esta nota, también debe ser respetuoso de las normas que rigen al buen ciudadano “Nadie tiene porque excederse”.