¿Preguntan por “Pablito” Rosas?… Se actualiza como DT en Argentina

*Quien fuera figura de los recordados “Mundialitos” y juvenil sensación del Trujillanos FC, entabló una amena charla vía WhatsApp con Diario de Los Andes. No tuvo dudas en afirmar que su paso por los “Guerreros de la Montaña” fue el mejor momento de su carrera acortada por lesiones

Pablo Rosas (el penúltimo de pie a la izquierda, al lado de Osnel García) con el plantel del Trujillanos FC en una gran época para el cuadro amarillo y marrón

“La lleva Pablito, deja a uno Pablito, deja otro, se cae Pablito, se levanta, sigue Pablito, viene el gol de Pablito y… gooolll”, fue una narración normal de Lázaro Candal a principios de la década de los 90 ¡Que hiciste Papaito!.. ¡Que jugada la de Pablito!.. Solía exclamar el jocoso el locutor canario, quien por esa época fue el  relator de la mayoría de los famosos “Mundialitos” por la señal nacional del desaparecido canal Rctv.

CIFRA

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Goles marcó Pablo Rosas en 21 partidos disputados de Liga Futve

 

“Papaito” Candal se exacerbó en emoción con cada jugada típica de Pablo Rosas, con su habilidad, potencia y pegada de perfil derecho, fue figura en una de las primeras generaciones que emocionaron a los fanáticos del fútbol venezolano a través de estos Torneos Internacionales Invitacionales (sub-15) que ayudaron a popularizar esta disciplina en un país básicamente “beisbolero”.

Era normal que los nombres tanto de “Pablito” como de Jorge “Choco” Giraldo, sonaran tanto para convertirse en ejemplo de niños y luego en referentes de las selecciones juveniles en campeonatos oficiales. Fueron sucesores de los Stalin Rivas y Juan Carlos Socorro (Socorrito), otros dos habilidosos y populares de esos escenarios televisivos que fueron los estadios caraqueños “Brígido Iriarte” y “El Olímpico”, pero a finales de los 80.

El paso de “Pablito” al profesional fue rápido y le tocó al Trujillanos FC ser el equipo que se beneficiara del talento de este volante ofensivo o atacante, oriundo del estado Sucre. Hoy ya cuarentón y retirado del balompié, está temporalmente en Argentina, país futbolero en el que aumenta su preparación como entrenador.

“Tengo un año en Argentina, me actualizo como Director Técnico, espero volver a para dirigir en Venezuela”, confió sin muchos detalles. “Estuve en momentos difíciles del país, ahora es un tema de actualizarme un poco”, indicó quien tuvo que alargar su estadía en la nación sureña debido al confinamiento social producto de la pandemia.

 

Figura de los “Mundialitos

“Mi primer campeonato internacional fue en Puerto Ordaz, muy similar a los Mundialitos pero no fue televisado. Ese fue con selección Venezuela y otras selecciones y equipos de otros países”, contó. “El DT fue el profesor Pedro Febles (Qepd)”, destacó orgulloso.

“De ahí venia esa base de jugadores que patrocinaba Eveba. De hecho patrocinaron ese evento, y después por Rctv”, rememoró. “En dos de esos Mundialitos quedamos subcampeones. Los encabezaba el profesor Carlos Castro”, recordó.

 

“Pablito” Rosas (ultimo hacia la derecha de los agachados), gran figura y capitán de Venezuela en los “Mundialitos” y luego en torneos oficiales con Selección Nacional

 

“Fue un grupo que nos mantuvimos casi los mismos De ese grupo salió (Edwin) Quilagury, Juan Carlos Barrientos (Qepd), (Manuel) Ponte, Iglesias, (Antonio) Ruso, (Juan) El Gato Baptista era arquero, Julio Magallanes el otro portero”, recordó solo a algunos de una generación de las que se archivan nombres como Reinaldo Melo (Qepd), Emilio Casas, Pedro Delgado, Emilio Barrera y hasta Jorge “Zurdo” Rojas, entre otros.

“En el último Mundialito si no pudimos ir a la final. Con los yugoslavos, creo que fue Ratomir”, tuvo recuerdos vagos. “En selecciones anteriores estuvo el profesor Augusto Viso”, agregó. “Después de jugar en selección en los Mundialitos y ser capitán, también jugué un Sudamericano en Colombia. También Bolivarianos que ganamos bronce”, habló de dos competencias internacionales en las que fue capitán.

Aparte disputó ocho Juegos Nacionales, durante los cuales representó a Distrito Federal (ahora Distrito Capital), Sucre y Nueva Esparta.

 

Familia con hermana mundialista

En un repaso por su vida, Pablo Ernesto Rosas Jiménez nació el 23 de octubre de 1976 en la Península de Araya, específicamente en el Hospital Virgen del Valle. Sus padres son Hernán Rosas y Magdalena Jiménez, pareja que tuvo en “Pablito” a su único varón. Sus hermanas son Cristina, Natasha, Paola y Andreina.

Está felizmente casado con Orlani Hernández. Tiene cinco hijos en total, quienes son Hernán, Pablo Jr, Nadim, Juan Diego y Paula. “Esas cosas de la vida, son cuatro hermanas las que tengo y después Dios me dio cuatro hijos varones seguidos”, bromeó al tiempo que señaló como la última de sus grandes felicidades a Paula, su hija menor.

 

Pablo Rosas en la actualidad junto a su esposa e hijos

 

Una de sus hermanas siguió sus pasos. Natasha es futbolista profesional y de gran nivel, ya que pertenece a la Selección Nacional de Mayores. “Ellá jugó Mundial Femenino con Venezuela en Trinidad y Tobago si no me equivoco actualmente en la gira que tuvieron por Italia”, atinó.

“Jugó en el futbol colombiano y ahorita está jugando en Brasil. Tiene una segunda temporada allá. La han convocado a la selección absoluta femenina”, extendió comentario sobre su hermana que ya es referente del femenino a nivel internacional.

“Es muy joven, desde chiquitica la vi y es impresionante lo que juega”, refirió. “Así que es una cuestión de familia”, hizo gala de su orgullo y sumó a su papá al relato. “Es que mi padre jugó futbol por muchos tiempo, con varios Juegos Nacionales. No pudo llegar a mayor nivel en el profesional por problemas personales, tenía que dedicarse a estudiar”, contó.

 

Su padre fue su primera inspiración

Natasha Rosas, la hermana que siguió sus pasos en el balompié profesional. Hasta jugó un Mundial con Selección Nacional Femenina

“No lo vi jugar porque se retiró muy joven. Es entrenador Fifa, con licencia profesional. Fue fundador de Peninsulares de Araya, como entrenador lo llevó a Primera División por primera vez”, repasó la vida de su padre, quien es un histórico del balompié sucrense.

“Mi papa era DT de Mariscales de Sucre y estuvo a punto de subirlo a Primera”, destacó. Indicó que “perdieron un famoso juego contra Marítimo en Caracas, cuando el recordado equipo rojiverde sube a Primera para convertirse en uno de los grandes del futbol criollo en esa época. “En Cumana quedaron 2-2 y en Caracas 1-1. No estaba aún la regla del gol de visitante, por eso  fueron a penales, era distinto”, completó el recuerdo.

Dijo que parte de su inspiración para jugar este deporte nació en Peninsulares de Araya con su papá. Ahí vio a jugadores que admiró siempre como “Cachorro” Betancourt y Cesar “Champions” Marcano. “Tuve la gran dicha de jugar con él en Nueva Cádiz. Y después lo tuve de asistente técnico en Zulianos FC”, señaló sobre Marcano.

“Grandes jugadores, ambos jugaron en Selección. Al Cachorro en Anzoátegui lo enfrenté con Trujillanos FC. Ellos fueron parte de mi inspiración”, reiteró.

“Después en el profesional ver de cerca a grandes jugadores en Marítimo y acompañar a ese equipo en algunos entrenamientos. Todo eso fue una gran inspiración”, resumió sus inicios. Habló de los momentos que vivió en los Premundiales, el tener cerca a otras grandes referencias como Stalin Rivas, otro por los que confesó gran admiración. O Luis Mendoza, a quien tuvo como entrenador y lo referenció  “uno de los mejores de todos los tiempos”. Como otra gran experiencia admitió que fue “jugar al lado de Juan Arango, uno de los fenómenos del futbol venezolano”.

 

 

Buenos y duros momentos en Trujillanos FC

”Debuté con Trujillanos FC a los 16 años. Directamente en Primera, no jugué segunda”, sacó pecho al referirse a su llegada al amarillo y marrón. “No hay duda que ahí viví los mejores momentos como futbolistas. Jugué la Copa Libertadores contra los paraguayos Olimpia, Cerro Porteño y el campeón nacional Caracas FC”, afirmó.

“Viví los mejores momentos, hasta marcar tres goles contra Deportivo Italia en Valera”, subrayó su mejor recuerdo goleador. “Me nombraron el mejor juvenil del país del profesional. Ese mismo año fui Atleta del Año en el estado Sucre”, enseñó sus premios.

Desde el estado Trujillo aún lo recuerdan, fue una sensación tenerlo en Valera. Las lesiones no permitieron que siguiera por más tiempo en el equipo que dirigió Rafael Santana Fontes. Salió del amarillo y marrón, conjunto que al perder a un imán para atraer fanáticos a la grada, salió en busca de un jugador similar como Alvris “Chocolate” Faure. Su acortada trayectoria, la continuó en Zulianos FC y Nueva Cádiz, escuadras en las que fue capitán.

“En Nueva Cádiz era de los de más experiencia pero tenía 23 años, imagínate, ya con Sudamericano, Bolivarianos, Trujillanos, Libertadores encima”, justificó. “Tremendo equipo teníamos. De ahí empezó Cesar Farías a subir como entrenador”, destacó sobre un plantel histórico que le dio paso a nada más y nada menos que el mismísimo Arango.

 “Ya a los 25 años yo ya tenía nueve años en el futbol profesional”, expuso su experiencia precoz. “Debido a mi lesión no pude continuar”, soltó en cuanto a lo que de seguro fue el momento más triste de su carrera.

“Fueron dos años con Trujillanos FC, no seguí porque me lesioné. Después de mi operación de ligamentos cruzados. El doctor Di Filippe junto a su amigo el Dr. Richard Páez, debido a mi edad también y por sus experiencias, estaban preocupados. Imagínate, el doctor Páez, medico traumatólogo aparte de ex jugador profesional que admiramos muchísimo y como entrenador mucho más”, narró parte de su drama.

“Gracias a ellos me recuperé de esa operación y regresé para vivir creo que incluso un mejor momento”, aseguró. Reiteró que regresó con un nivel bastante grande. “Jugué la Libertadores después de la operación, no sé si recuerdas un juego contra el Caracas en Valera. Es  una entrada muy fuerte del importado del Caracas FC, González Palacios, perdí toda mi primera operación y me tuvieron que hacer otra intervención quirúrgica”, lagrimeó.

“Hoy en día en una temporada te pueden salir varios jugadores al extranjero, pero no quizás al nivel de nosotros, porque jóvenes como nosotros tuvimos oportunidad de jugar pero no había mucha posibilidad sin esa regla del juvenil en cancha que hay ahora. Eran pocas las posibilidades de jugar en Primera, en donde estaban futbolistas de mayor recorrido no era fácil”, opinó.

“A veces era difícil estar como volante o delantero al lado de jugadores como Rodrigo Soto, Roberto Zarate con un nivel tan impresionante. No era sencillo”, ejemplificó.  “Te lo comento porque hay mucha gente que no conoce eso o no sabe. Hoy en día cualquier jugador que sea el mejor juvenil venezolano del país tendría al menos oportunidad fuera el país”, explicó quien en el conjunto guerrero siendo apenas un imberbe, también compartió vestuario y jugó al nivel de otros futbolistas consagrados en la liga nacional como Osnel “Gato” García, Jesús “Chuy” Valbuena, Leonardo González, Marcos Mathias, Carlos “Chacal” Ramírez, José de Jesús “Chuy” Vera, Orlando “Canillón” Rengifo, entre tantos otros.

Posteriormente recordó que a los a los 16 años le practicaron su primera operación de meniscos. “Qué habría sido de Pablo Rosas sin esas lesiones”, mandó en forma de interrogante.  “Pero bueno la lesión no es tanto en la medicina, sino la recuperación, creo que estaba la falla. Eso que se hace actualmente, fisioterapia, las pesas,  ese trabajo del día a día no lo podía abandonar. A lo mejor en esos momentos uno pensaba que era recuperarse y jugar. Ahora eso ha cambiado mucho, ya no es así”, comparó.

“Era un fútbol difícil esa época, y con 16 años, debuté y lo había cumplido hacia poco, tenía 15 en el último Mundialito. Recuerdo, me fue a buscar Rafa Santana al aeropuerto”, rememoró su arribo al aeropuerto Antonio Nicolás Briceño de San Rafael de Carvajal.

“Te daban patadas por atrás, no se protegía tanto al jugador hábil. Si no es por la lesión, bueno ya pasó…”, lamentó la dureza del fútbol criollo en esa época.

Contacto con ex compañeros

“Siempre estoy en contacto con grandes amigos, como Pequeño Rondón, Juan Arango, Edwin Quilagury que dirige Llaneros, Euro Guzmán que está en Lala FC. Bueno si me pongo a mencionar, con el mismo Cheli (José “Chelique” Duran), siempre a la distancia hablamos”, nombró a algunas de las amistades que le dejó su carrera deportiva.

“(Luis José) Pacheco Vallenilla, un gran amigo de varios años como compañero de habitación en la casa club de TFC. Lobo Caraballo, con quien tuve la oportunidad de coincidir cuando estuvimos como gerente en Maracaibo. Él estuvo de asistente técnico”, añoró sin parar.

 

Compromiso con su pueblo

“Tengo un compromiso con la gente de Araya”, advirtió su apego por la península. Vale recordar que Rosas fue candidato a alcalde de su municipio Luis Eduardo Acosta. “Siempre con la inquietud, la importancia que tiene mi municipio que es el de la Península de Araya”, añoró. “Es un municipio que tiene mucho potencial pero le falta mucho apoyo”, suspiró.

Rosas no solo es ídolo deportivo de la Peninsula de Araya, sino también un líder político

 

“Espero que pase la pandemia me cuesta regresar. Estoy siempre pensando en el futbol pero sin olvidar a mi pueblo”, siguió nostálgico. Como buena gloria deportiva evitó caer en temas políticos.

“Como le digo siempre a los jóvenes. Tú sabes cuánto talento hay allá”, preguntó sobre esa zona de la cantera cumanesa. Se auto contestó: “Robert Hernández es de allá, el que le hizo ese golazo al Boca Junior”.

Con mucha intensidad, Rosas siempre dejó ver la posibilidad de volver al futbol. Venezuela espera por “Pablito”, en especial la Península de Araya… Y por qué no un regreso a Valera. Hay que decirlo.

 

 


DATOS CLAVES:

Con selecciones nacionales:

Con Trujillanos FC:

(Datos del Libro “Trujillanos FC, 30 Años de Historia” de Fernando Bravo)

 

 


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