Policía asesinado en Valera intentó frustrar un atraco

Jesús Miguel Viloria Torres (25), tenía dos años de servicio y residía en Betijoque.

Un efectivo policial de la Brigada Ciclística de Valera, adscrita a las Fuerzas Armadas Policiales del Estado Trujillo (Fapet), fue vilmente asesinado por dos sujetos desconocidos a bordo de una motocicleta. Los vándalos se encontraban en pleno acto delictivo, robaban a un ciudadano en plena vía pública y el oficial Jesús Miguel Viloria Torres (25), que pasaba justamente por el lugar, actuó de inmediato, aunque no contaba con su arma de reglamento.

El uniformado se desplazaba en su motocicleta personal por la zona, éste se dirigiría a la Comandancia de Morón para buscar su respectivo armamento y cumplir con su servicio. Mientras se movilizaba en la esquina de la avenida 13 con calles 6 y 7, se percató de que dos irregulares a bordo de una moto realizaban un atraco a un transeúnte; el oficial aceleró y chocó contra el vehículo de dos ruedas de los hampones, aventándolos al pavimento.

Viloria logró neutralizar a uno de los delincuentes, pero el parrillero se escabulló y escudó con un vehículo que estaba estacionado, y al ver al oficial indefenso, y sin armamento; sacó su arma de fuego y le propinó un primer disparo en la sien, el proyectil traspasó el casco de su moto; herida que lo dejó tendido sobre la calle. El pistolero, insatisfecho con el resultado del primer disparo, decidió propinarle dos tiros más que acabaron de inmediato con la vida del funcionario.

Efectivos adscritos a la Brigada Hospitalaria, fueron los primeros en acudir a la escena del crimen; mientras unos iniciaron una persecución para dar con los criminales, otros se quedaron para ayudar al oficial herido, pero no había mucho que hacer. Los disparos que recibió le segaron la vida a un joven de apenas 25 años; uno que murió en función de su labor, la cual es salvaguardar a los ciudadanos de la clase de persona que lo asesinaron vilmente, incluso arriesgando su vida.

Dos policías asesinados

Las Fuerzas Armadas Policiales del Estado Trujillo (Fapet) han sufrido dos bajas sensibles este año; dos funcionarios policiales adscritos a dicha institución perdieron la vida a mano de delincuentes. El viernes 11 de agosto, hace 85 días, fue asesinado Miguel Ángel Bastidas (31), oficial de las Fapet destacado en la Estación Policial 2.4 Escuque en la vía principal de La Cabaña del municipio de la tierra de las nubes.

Bastidas le comunicó al conductor de un vehículo marca Chevrolet modelo Malibú que se detuviera para realizar una inspección de rigor, ya que habían reportado el robo de un automóvil, cuyas características correspondían con el mismo. Del auto se bajaron cuatro personas, y una de ellas, rápidamente, despojó al oficial de su arma, lo adentró al carro y le propinó un disparo en la cabeza que acabó con su vida a los pocos minutos de haber ingresado al Hospital “Dr. Juan Motezuma Ginnari” del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (Ivss), ubicado en la urbanización La Beatriz del municipio Valera.

Bastidas, al igual que Viloria, murieron cumpliendo sus labores como funcionarios policiales. Hasta ahora, los asesinos de ambos funcionarios están siendo rastreados por los diferentes cuerpos de seguridad del estado; Fapet, Cicpc y GNB, se encuentran desplegados en todo el territorio para evitar que estos huyan y salgan airosos de los crímenes que cometieron.


Persisten operativos

Patrullas policiales de las Fapet se movilizan a toda hora a lo largo y ancho del municipio Valera, y jurisdicciones aledañas, para dar con el paradero de los asesinos del oficial Viloria, los cuales se encuentran plenamente identificados. Las autoridades se mantienen herméticas, no han dado una versión oficial de lo ocurrido, pero se conoció que manejan buenas pistas y en las próximas horas podrían capturar a los homicidas.


 

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