Poco a poco | Por: Eduardo Viloria

 

 

Los problemas que confrontan los municipios asentados bajo el área de influencia de la carretera panamericana son similares en muchos casos.

Un ejemplo, la falta de  agua en los hogares de Bolívar, Sucre, Miranda y Rafael Rangel,  agravada por la crisis que trajo el colapso del Acueducto Triestatal, que traía el imprescindible elemento de uso cotidiano en el hogar, desde el rio Torondoy, estado Mérida.

Sobraban  las explicaciones sobre la obra, Acueducto Triestatal, lo que   significaba que  serviría a poblaciones de tres  estados; Nueva Bolivia en Mérida, Caja Seca en Zulia y municipios del estado Trujillo, asentados bajo el área de influencia de la panamericana.

Este  esfuerzo  valió la pena, pudiéndose calificar como exitosa la obra ejecutada en un gobierno de la IV; cuando permitió que grandes chorros de agua llegaran no solo a Bolívar, en toda su extensión, sino que también llego a Sucre y Miranda donde concluía esta obra, siendo el estado más beneficiado con la obra en mención, el estado Trujillo.

Obra a la cual no se le prestó mantenimiento que necesitaban las redes  del acueducto, como tal, no obstante las advertencias que hacía la dirigencia comunitaria de estos municipios, señalándose que el agua para consumo humano, estaba siendo utilizada para regadíos de siembras y mantener ganado de prosperas fincas, mostrándose inclusive  las perforaciones a lo largo de toda la red de tuberías, lo que llevó al colapso del acueducto.

 

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