Placer activo versus placer pasivo | Por Ernesto Rodríguez

 

Una de las concepciones más interesantes sobre la felicidad es la que planteó el filósofo inglés John Stuart Mill (1806-1873) en su conocido ensayo: ‘Utilitarismo’ (1861), donde señala que: “un estado de placer exaltado dura sólo un momento, o, en algunos casos y con interrupciones, horas o días. Es el resplandor momentáneo del gozo, pero no su llama firme y permanente” (cap. 2).Por eso según Mill la felicidad no es: “una vida en continuo éxtasis, pero sí una existencia integrada por momentos de exaltación, dolores escasos y transitorios y muchos y variados placeres, con predominio de los activos sobre los pasivos” (cap. 2).

No obstante, Mill distinguía claramente entre placeres superiores y placeres inferiores. En efecto, Mill defiende a los antiguos filósofos epicúreos griegos que asignaban un valor mucho más elevado a los placeres superiores del intelecto, los sentimientos y la imaginación que a los de la mera sensación. Por eso Mill dice: “Los seres humanos tienen facultades más elevadas que los apetitos animales y, una vez que se han hecho conscientes de ellas, no consideran como felicidad nada que no incluya su satisfacción […] Pocas criaturas humanas consentirían que se las convirtiera en alguno de los animales inferiores, a cambio de un goce total de todos los placeres bestiales ; ningún ser humano inteligente consentiría en ser un loco, ninguna persona instruida, en ser ignorante, ninguna persona con sentimientos y conciencia en ser egoísta e infame […] Un ser de facultades más elevadas necesita más para ser feliz; probablemente es capaz de sufrir más agudamente; y, con toda seguridad, ofrece más puntos de acceso al sufrimiento que uno de tipo inferior ; pero a pesar de estas desventajas, nunca puede desear verdaderamente hundirse en lo que él considera un grado inferior de la existencia […] Es mejor ser un hombre insatisfecho que un cerdo satisfecho, es mejor ser Sócrates insatisfecho, que un tonto satisfecho” (cap. 2).

La insistencia de Millen una vida con ‘predominio de los placeres activos sobre los placeres pasivos, podemos relacionarla con los estudios realizados por el psicólogo yugoeslavo estadounidense MihalyCsikszentmihalyi (nac. 1934) que ha estudiado desde hace décadas las actividades del ser humano que realmente son absorbentes y desarrolló el concepto de lo que llama ‘flujo’. Según este autor una actividad de ‘flujo’ es la que cumple con los siguientes requisitos: 1) La tarea es exigente y requiere habilidad 2) Nosotros nos concentramos 3) Hay objetivos claros 4) Nosotros obtenemos una retroalimentación inmediata 5) Nosotros nos involucramos profundamente, sin esfuerzo 6) Hay una sensación de control 7) Nuestro sentido del yo se desvanece 8) El tiempo se paraliza.

Según este autor las actividades humanas que cumplen con tales requisitos son por ejemplo la actividad de una bailarina que se absorbe y concentra en su actividad de bailar. También la actividad de un artesano que se concentra en su trabajo artesanal o la de un deportista que se dedica profundamente a su actividad. Podríamos añadir la actividad del ejercicio físico, intelectual (leer, escribir), etc. Csikszentmihalyi realizó un estudio con 250 adolescentes de ‘flujo bajo’ y 250 adolescentes de ‘flujo elevado’. Su investigación demostró que los adolescentes de ‘flujo elevado’ son los que se dedican a actividades deportivas o manuales o intelectuales. Por el contrario, los adolescentes de ‘flujo bajo’ son los que ven mucha televisión y realizan pocas actividades. En todas las mediciones de bienestar psicológico, como autoestima estar involucrado, los adolescentes de flujo elevado dieron mejores resultados. Por eso, el psicólogo estadounidense Martin Seligman (nac. 1942) dice: “En la noche, entre escoger leer un buen libro y ver televisión, escogemos la última alternativa, aunque los estudios revelan que el estado de ánimo promedio al ver televisión es ligeramente depresivo” (Pag 117 en Martin Seligman (2002) ‘AuthenticHappiness’)

 

Ernesto Rodríguez

ernestorodri49@gmail.com

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