Pampán sin agua,luz, gas, gasolina, ni Intercable

Colapso total de servicios públicos

El poco transporte con salvocunducto, han sustituido el servicio seguro de Bus Trujillo.

La paciencia y grado de tolerancia que vive la ciudadanía activa del municipio Pampán y todo el estado Trujillo, esencialmente la gente que ha visto frustrada su labor diaria en todos los aspectos,comienza a resquebrajarse, motivado a la falla permanente y colapso casi total en los servicios básicos, comenzando por la paralización definitiva del transporte público, a raíz de la «cuarentena» por el Covid-19 decretada por el Gobierno Nacional, decisión que ha limitado hondamente la natural cotidianidad vecinal.

A este detalle, el cual es comprendido por el pueblo sabio de esta comarca regional, se une los contínuos cortes en el suministro eléctrico, la ausencia total del gas doméstico, la falta intermitente en el servicio de agua potable y para colmo de males las largas interrupciones y fallas de servicios como Internet e Intercable.

Todo este cúmulo de problemas ha llevado a la gran mayoría de habitantes de las cuatro parroquias a elevar su más enérgica voz de protesta, ante lo que consideran una exagerada desidia y negligencia por parte de los entes e instituciones encargadas en garantizar los mismos, con todo el respeto y consideración que sus funcionarios nos merecen.

Muchos han sido los tuits, correos y llamadas a nuestro medio informativo, por parte de personas que se declaran «totalmente acorraladas» con esta crisis generalizada que amenaza con volvernos locos, sin que se vislumbre soluciones a corto plazo.

 

Solicitudes no son escuchadas

La señora maría Eugenia Castellanos, residenciada en la parroquia Pampán, expresó que : «Desde hace seis meses no tengo gas en la casa,producto de las roscas que lo venden. He tenido que cocinar con leña y en mi hogar todos sufrimos de males respiratorios.Tampoco nos llega el agua con regularidad y para rematar, cada rato de va la luz, se apaga Intercable y falla Internet».

Por su parte, el señor Roberto Castellanos,del sector Canalete, dijo que no consigue gasolina para su vehículo en ninguna bomba cercana, sin embargo se habla de uniformes y control del producto en dólares, lo cual es tamaña locura en la actual situación de emergencia que vivimos… ¡Aqui los que gobiernan hacen lo que les da la gana y nadie los sanciona! -espetó en tono molesto.

Otro ciudabno que dio su opinión a DLA, fue Prudencio García Gil, oriundo de la parroquia Santa Ana, quien hace un llamado al director de Bus Trujillo,ingeniero Darwin Pérez, con la finalidad de que active la ruta que vaya de esa turística e histórica población a ciudades como Valera y Trujillo, al igual que desde Pampán,pero no solo llevando a gente delos hospitales, sino a trabajadores de los demás organismos priorizados y alpueblo que cumpla con la norma sanitaria exigida.

» Además de la escasez notoria de comida en nuestras casas,ahora tampoco podemos salir a los mercados, bajo el pretexto del tal «coronavirus».

«Entiendo que hay que tomar previsiones sanitarias, pero con un control adecuado y supervisión, el pueblo que cumpla con los requisitos exigidos, puede salir a realizar sus diligencias o vamos a llegar  al extremo de comernos unos con otros. O nos jode el coronavirus o nos morimos de hambre»-subrayó muy bravo.

Juan Araujo,vigilante privado que reside en El Cruce de Flor de Patria, es otro afectado, que vía telefónica, nos pide que por favor, reactiven la unidad de Bus Trujillo que sale de Café Venezuela, ya que por esa zona solo pasa un autobús que lleva solo enfermeras y no presta servicio a trabajadores tan importantes como seguridad, alimentación,telecomunicaciones,comercio e industria, tan básicas para que Trujillo no se paralice y haya un colapso general».

En síntesis son tantas las inquietudes de la colectividad durante esta cuarentena y terrible recesión económica, que tendríamos que elaborar un «libro completo» provisto de muchas páginas para enumerarlas a todas;
sin embargo nuestro llamado es al ciudadano gobernador G/J Henry Rangel Silva, hombre serio, precedido por su fama de cumplidor de sus deberes y promesas,para que atienda el clamor popular, el cual no se basa en simples argumentos nuestros de crítica malsana, sino de una realidad latente que puede remediarse en gran parte, solo con la voluntad política y su poder de decisión.

Ayudemos pués, no solo a nuestras autoridades a combatir este flagelo que amenaza la humanidad entera, sino echémos esa «manito» solidaria a quienes la necesitan…»todos nosotros».

Salir de la versión móvil