Las recientes sanciones económicas emitidas por el presidente norteamericano Donald Trump, contra el Gobierno venezolano que lidera Nicolás Maduro, pudieran tener graves consecuencias para la golpeada actividad financiera nacional.
“La nueva medida del presidente (Donald Trump) prohíbe realizar transacciones con títulos de deuda y acciones emitidos por el Gobierno venezolano y su compañía petrolera estatal (Pdvsa)”, se lee en el comunicado de la Casa Blanca. Esto significa una “tembladera” en la línea de flotación financiera de un país que consigue con la exportación de petróleo 96 de cada 100 dólares en divisas y, que debido a la necesidad de importar alimentos, medicinas y bienes de primera necesidad, tiene una gran dependencia del sector exterior.
“La mayor parte del sistema financiero mundial tiene actividades en Estados Unidos, por lo que el Estado venezolano va a tener muy difícil lograr nuevo financiamiento o vender nuevos activos”, explicó a una agencia internacional de noticias el economista venezolano Alejandro Grisanti, experto en deuda.
Grisanti señaló que se le dificultarán al Gobierno los inminentes pagos de los bonos que vencen en dos meses. Además afirmó que las sanciones de EEUU ponen al Ejecutivo en una disyuntiva: “pagar la deuda externa o importar más alimentos y medicinas”.
El mismo presidente Nicolás Maduro admitió que estas medidas tomadas por su homólogo estadounidense “afectan gravemente, además hieren a la economía en plena fase de recuperación”.
Desde la misma izquierda se ha puesto en duda que un Gobierno “socialista” privilegie el pago de los compromisos financieros por encima de satisfacer demandas que podrían calmar un clima social hostil hacia el Ejecutivo.
“Yo tengo preparado un conjunto de decisiones y medidas para defendernos del bloqueo comercial, petrolero y financiero que va a decretar Donald Trump contra Venezuela. Así lo anuncio. Estamos preparados”, dijo el Presidente esta semana usando el término “bloqueo”, el que ha empleado su aliada Cuba para referirse durante décadas al embargo económico y comercial de Estados Unidos a la isla.
Entre las consecuencias derivadas de las sanciones podría estar que Pdvsa no pueda repatriar los dividendos que genera su filial estadounidense Citgo. Al respecto el economista e investigador del Centro Internacional Miranda, Víctor Álvarez Rodríguez, señaló que las sanciones del Gobierno de los Estado Unidos contra Venezuela podrían afectar al crudo venezolano, y criticó la posición que ha asumido la oposición.
“¿Habrá pensado la oposición en la catástrofe que tendrá que reconstruir – en el caso de desplazar a Maduro del poder – si Estados Unidos suspende la compra de petróleo venezolano?”, se pregunta el economista.
Asimismo indicó que “Pdvsa extrae 2.1 millones de barriles de petróleo por día (bpd), destina 500 mil al mercado interno, 650 mil a la deuda China-Rusa, 100 mil a Cuba-PetroCaribe y sólo le quedan 800 mil para exportar”.
El investigador se pregunta que a quién le venderá el crudo Venezuela, si Estados Unidos deja de comprar 700 mil bpd a Venezuela. “¿Qué pasa si en un mercado con sobreoferta de petróleo EEUU deja de comprar estos 700 mil bpd? ¿A quién se lo vendemos? ¿Con qué descuento?”, reflexionó Álvarez.
Además indicó que sin poder vender el petróleo “¿qué proveedores le venderán a Pdvsa crudos livianos y diluyentes para mejorar los crudos pesados de la Faja Petrolífera del Orinoco?”.
Limitado
Para el economista Víctor Álvarez, las sanciones de EEUU contra el gobierno de Venezuela se traducen en limitaciones a firmas estadounidenses como Chevron, Halliburton, Weatherford, etc. a la hora de hacer negocios con Pdvsa, cuestión que afectará la extracción de crudos y la recuperación de la compañía. “La sanción puede incluir la prohibición para vender gasolina y los diluyentes que Pdvsa necesita para mejorar los crudos pesados de la Faja Petrolífera del Orinoco”, adelantó.