Eduardo Viloria/DLA.- El Obispo Diocesano de Trujillo, José Trinidad Fernández Angulo, estuvo presente en la
toma de posesión del nuevo sacerdote de la parroquia Virgen del Carmen, José Manuel Castro, actividad que se cumplió en el templo parroquial de Sabana de Mendoza, el pasado viernes 4 en horas de la tarde, donde el sacerdote Castro sustituyó al presbítero Gildardo Villarreal, sacerdote muy apreciado en la comunidad por la feligresía de la parroquia, que tiene como conductora espiritual a la virgen del Carmen.
La toma de posesión del nuevo titular de la parroquia Virgen del Carmen, por parte del sacerdote José Manuel Castro, se convirtió en fiesta, asistiendo a la misma numerosas personas seguidoras de la religión católica, el alcalde Keiver Peña, el presidente del Concejo Rafael Durán y los grupos de apostolado que hacen vida activa en la parroquia, no faltando en la salutación de bienvenida, los tamboreros de San Benito que sonaron duro, sus tambores y requintas, dándole la bienvenida al nuevo sacerdote de la parroquia.
A la actividad acudieron los sacerdotes de las parroquias vecinas, San Agustín de Hipona, Virgen de Chiquinquirá, San Benito de Palermo de Sabana Grande y San Juan Bautista de Betijoque, entre otros.
Hubo palabras de Keiver Peña y Rafael Durán en su condición de conductores del poder público municipal del municipio, Alcaldía y Concejo los cuales dieron la bienvenida al obispo diocesano, y le otorgaron reconocimiento especial como máximo conductor de la iglesia de Trujillo, que declaró día de júbilo su visita y la actividad cumplida de toma posesión de la parroquia Virgen del Carmen por el nuevo Sacerdote Manuel Castro.
Agradeció el obispo la bienvenida que le dieron al dejar en posesión del cargo al sacerdote, José Manuel Castro, oficiando la misa de la ocasión especial, en compañía de los sacerdotes presentes.
El presbítero Manuel Castro en su condición de sacerdote oficial de la parroquia Virgen del Carmen, dio agradecimiento a las Diócesis y feligresía por la asistencia, donde espera cumplir a cabalidad con la responsabilidad, que le ha sido encomendada.
.