El reconocido luchador social Julio Romero, nuevamente ratificó la delicada situación por la cual atraviesa la bella e histórica población de Niquitao que quizá rompe un récord de abandono como nunca antes lo había vivido, porque realmente es la primera vez que presenciamos una situación como esta –dijo el dirigente-. Niquitao está abandonado en su totalidad y podría empezar por preguntarle al alcalde ¿Usted cree que es posible que desde hace 5 meses los camiones del aseo urbano no volvieron a visitarnos? Los niquitaences no encontramos qué hacer con la acumulación de desechos sólidos, eso solamente por nuestra paciencia lo hemos soportado estoicamente. Ustedes se imaginan lo que son 5 meses ¿Después de haber tenido un servicio casi óptimo de recolección de la basura semanalmente? La última vez que lo hicieron fue un día antes del 2 de julio fecha de la celebración de un nuevo aniversario de la Batalla de Niquitao que llena de orgullo a todos los trujillanos. Hasta ahora es la última pantalla de la cual tengamos conocimiento y es la mejor expresión que no tenemos un gobierno municipal que cumpla con sus funciones, tampoco hay gobierno regional o ambos se pusieron de acuerdo para no tomarnos en cuenta contando con el aval del gobierno nacional que ni por casualidad nos arregla la vialidad. Que decir de la dirigencia parroquial ¿es que no le están parando o también se están haciendo los de la vista gorda en cuanto a las diversas dificultades que confrontamos y entre ellas también el mal estado de las calles?
Entre otros problemas
Puedo mencionar entre otros problemas el alumbrado público, que por la oscuridad nos hace asemejar a un pueblo abandonado. Las Plazas: Bolívar y Monseñor Jáuregui más parecen una boca de lobo. Qué hablar de la carretera que desde Boconó nos trae para las parroquias: Tostós, Mons. Jáuregui (Niquitao) y General Ribas (Las Mesitas), que está en deplorables condiciones, incluyendo varios deslaves que durante estos meses de lluvia se han estado sucediendo.
Respeto y consideración
Si algo es crítico lo constituye el problema de GLP, lo cual nos tiene al borde de estallar porque aquí ya no aguantamos los fogones de leña por todas partes y aunque a veces a manera de burla lo justifican que se trata de un rescate de tradiciones, para la mayoría esa burla constituye una ofensa porque a consta de nuestra propia salud (Problemas respiratorios), nunca podrá ser más cómodo para cocinar que con el gas doméstico.
Los pueblos se merecen respeto y nosotros lo exigimos. También reclamamos la debida consideración. Los gobernantes deberían ser honestos y así como supuestamente se pusieron de acuerdo para no atendernos, también deberían decirnos que acudamos al gobierno de Barinas porque su gestión no da para más.