No creyeron en favoritismos, localías, bateadores poderosos, ni en equipos más completos, en nada creyeron estos históricos Nacionales de Washington, que superaron a los Astros de Houston por cuarta vez a domicilio para titularse como campeones de la Serie Mundial 2019.
El objetivo siempre estuvo claro, a pesar de perder tres juegos consecutivos en su “Nationals Park”, fue en el mismísimo “Minute Maid Park” de Houston en donde refrendaron sus ansias de ganar para darle el primer título a la capital de los Estados Unidos desde que los desaparecidos Senadores lo hicieran en 1924.
CIFRA
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Años tardó la franquicia en Washington (se mudaron desde Montreal en 2005) para ganar su primera Serie Mundial
Casi cien años esperó el DC para saborear la máxima gloria en Grandes Ligas, aparte que esta misma franquicia nació en 1969 pero en el país vecino Canadá con el nombre de Expos de Montreal. Con esa designación ni siquiera alcanzaron a jugar la SM, así que fueron 50 años de sequía.
Lo hecho tiene un nivel de dramatismo y de proeza digno para una película de las tantas que se han filmado en Hollywood sobre béisbol, pero a esta no es necesario agregarle nada de ficción para matizar un relato verídico, que con la sola propuesta se vende sola la idea y hasta pinta para el Premio Oscar.
Es que antes de comenzar la campaña tenían una gran incertidumbre, nadie daba un dólar por los Nacionales, porque perdieron a su estrella Bryce Harper, quien se fue a la agencia libre y firmó con los Filis de Filadelfia.
A mitad de temporada el manager Dave Martínez estaba en el “ojo del huracán”. Un record negativo del comienzo los hacia ver muy débiles, pero así como remontaron la cuesta hasta terminar con record de 96-69, así resolvieron muchos de sus partidos en postemporada.
Su marca de ganados y perdidos dio para un 574 de average que fue superior al campeón de la División Central, Cardenales de San Luis. A estos se los encontraron en la Serie de Campeonato y los barrieron para quedarse con el primer título de Liga Nacional.
Nacionales siempre salieron adelante ante escuadras en el papel, más fuertes. Pasaron con la opción del comodín y eso ya lo dice todo, tuvieron que ganárselo en un juego dramático a Cerveceros de Milwaukee, un marcador 4-3 en el que fueron conducidos por el joven sensación Juan Soto. Luego sacaron de carrera a dos poderosos como Dodgers de Los Ángeles y Cardenales de San Luis.
Dodgers estuvieron apenas a seis outs de ganarles esa serie, pero dos caballos como Anthony Rendón y Howie Kendrick, se unieron al nuevo fenómeno Soto, para estropearle los planes a uno de los roster más caros de la actualidad.
Rotación inolvidable
Llegó la lucha por la corona de Liga, ahí fueron más contundentes, les ganaron los cuatro enfrentamientos. La inspiración estuvo en su máximo punto, el pitcheo infranqueable, terminó consagrada como una de las mejores rotaciones jamás vistas en estas instancias decisivas: Max Scherzer, Stephen Strasburg, Aníbal Sánchez y Patrick Corbin.
Hicieron ver inútiles a una escuadra como Cardenales, que además de un trabuco contaban con una mayor experiencia. La inspiración y pelota de calidad que jugaron, se extendió por dos partidos más, porque en Houston ganaron los dos primeros encuentros de la SM. El temor de barrida se disipó para Astros solo porque tienen jugadores que además de calidad y experiencia, son líderes naturales que inspiran en momentos cumbres, caso de su líder el venezolano José Altuve.
Resulta que Astros barrieron en Washington, pero los Nacionales fueron más grandes que eso. Repitieron par de victorias en Houston, incluso hasta recuperaron a su AS Max Scherzer para que le ganara duelo de pitcheo a cortante Zack Greinke en el séptimo.
Las decisiones de Martínez fueron ganadoras en el decisivo, principalmente cuando prefirió que el relevo largo lo hiciera Corbin en vez del experimentado venezolano Sánchez, quien en líneas generales se vio mejor y fue más decisivo en postemporada.
Corbin cumplió esta vez y aseguró el histórico cuarto triunfo. Strasburg con dos laureles en este Clásico de Otoño fue candidato a Jugador Más Valioso, pero el novato Soto fue mucho lo que aportó con su bate y se quedó con ese premio.
Kendrick y Rendón con jonrones en el séptimo capitulo fueron la oportuna bujía que prácticamente nunca le faltó a Nacionales. En cuanto a los criollos, Nacionales contó con el aporte del experimentado Asdrúbal Cabrera, quien ligó de 3-1. Por Astros, José Altuve se fue de 5-1 y Robinson Chirinos de 4-0.
Las dos caras del banquillo
“Es un grupo de chicos resistentes e implacables. Ha peleado todo el año”, describió Dave Martínez, quien es el segundo piloto puertorriqueño en ganar la SM en forma consecutiva. Alex Cora se coronó el año anterior con Medias Rojas de Boston.
“¿Adivinen qué? ¡Seguimos en la pelea y la ganamos!”, gritó Martínez durante el festejo, agregándole dos palabras al lema que los acompañó en toda esta travesía.
Entretanto en la otra acera. “Tengo acá a un grupo de hombres con el corazón roto, quienes hicieron todo lo posible por traer a esta ciudad un campeonato de la Serie Mundial. Nos quedamos a un triunfo”, lamentó el piloto de Houston, AJ Hinch.
Ya en la meca del cine deben estar buscando un par de primeros actores que protagonicen estos históricos papeles. Hay que decirlo.