Un sujeto que estaba siendo buscado activamente por el homicidio de un vigilante privado, fue abatido por funcionarios de la División Contra Homicidas del Cicpc – Táchira que intentaron detenerlo en un rancho ubicado en la parte alta del Barrio Santa Lucia, en El Corozo y se enfrentó a tiros con los funcionarios, utilizando para ello una pistola marca Browning que había sido robada hace casi 25 años en la ciudad de Caracas.
Voceros del referido cuerpo detectivesco explicaron que el hombre que tenía registro por otros delitos y también estaba solicitado por cuestiones de drogas, se resistió al arresto y utilizó un arma de fuego de alta potencia, para disparar contra los funcionarios, que se vieron en le necesidad de responder al fuego, para preservar su integridad física.
El abatido
El hombre fue identificado como Rafael Antonio Santos Monrroy, venezolano de 27 años de edad, de ocupación mecánico, conocido con el apodo de “El Pito”, con residencia en la parte alta del Barrio Santa Lucía, en El Corozo, municipio Torbes y dejó de existir en momentos que era trasladado a un centro asistencial, tras ser herido de bala durante el enfrentamiento.
El hecho ocurrió en horas de la tarde del pasado miércoles, cuando los funcionarios llegaron al referido sector y ubicaron el rancho donde estaba oculto el sospechoso, que no acató la voz de alto y se enfrentó a los funcionarios, disparando con el arma de fuego que es considerada como de alto poder ofensivo.
Además de estar requerido por el homicidio del vigilante privado, tenía en su contra una orden de captura emitida por el Juzgado Primero de Control del estado Táchira por cuestiones de drogas. En su poder se encontró el arma utilizada para enfrentar a los funcionarios, una pistola marca Browning, calibre 9 milímetros, que estaba solicitada por las sub delegación del Cicpc de El Paraíso, Caracas, con fecha 21 de enero de 1993, por el delito de hurto
Robo y homicidio
Dijo nuestro informante que el pasado mes de agosto, en la troncal 005 a la altura de la pasarela peatonal de El Corozo, cerca del Barrio Santa Lucía, durante asalto a una unidad de transporte público, fue asesinado de un disparo el vigilante privado José María Barajas Bautista, venezolano de 65 años de edad, que se trasladaba, junto a su hijo, también vigilante, desde su residencia en San Josecito, hasta San Cristóbal donde debía trabajar.
Cuando la busetas transitaba por el sector de Santa Lucia, un hombre armado de pistola, sometió a los pasajeros para despojarlos de sus pertenencias y se dirigió hasta donde se encontraba el hijo de Barajas para quitarle su teléfono celular, pero este se resistió. Jesús María Barajas acudió en auxilio de su hijo y se tranzo en lucha con el ladrón, que le disparó, hiriéndolo de gravedad, al tiempo que bajo de la unidad de transporte para escapar, siendo seguido por el hombre herido que apenas si pudo dar unos pasos, pues se desplomó sin vida en plena carretera.
Labores de inteligencia
Los detectives que acudieron al lugar para el levantamiento del cadáver, asumieron de inmediato la investigación bajo el mando de los comisarios José Ricardo Pernía, director de la Delegación estadal Táchira y Johan Smith Niño, jefe de la División de Investigaciones de Homicidios, que pronto lograron obtener información que resulto puntual para esclarecer el caso. 
El hecho que el sospechoso corriera hacia la parte alta del Barrio Santa Lucía despertó sospechas y al ahondar en las investigaciones fue considerado como presunto autor del hecho, el apodo de un mecánico de carros, conocido como ·”El Pito”, a quien comenzaron a buscar activamente.
“Lamentablemente no fue posible la detención de este ciudadano, por cuanto se resistió al arresto y se enfrentó con arma de fuego a los funcionarios. Durante el incidente fue herido y pese a que inmediatamente fue auxiliado por los mismos detectives y traslado a un centro asistencial, se produjo su deceso”, acotó el informante.
Muerte accidental
Finalmente se dijo que los funcionarios de la División Contra Homicidios Táchira lograron aclarar, en cuestión de horas, el homicidio de un joven agricultor identificado como José Veleño Rangel, venezolano de 22 de edad, ocurrido en la finca Doña Irene, sector Los Bancos en altos de Caño del Tigre, cerca de San Rafael de El Piñal, municipio Monseñor Alejandro Fernández Feo.
Esta muerte es considerada como accidental, por el manejo indebido de arma de fuego y como presunto responsable ha sido detenido un adolescente de 15 años de edad, de quien no se revelaron detalles por cuestiones de tipo legal. Este menor fue trasladado en horas de la mañana de este viernes, a Medicatura Forense, para evaluación de carácter físico.
Dijo el funcionario que este homicidio ocurrió de manera accidental, cuando el joven ahora fallecido, junto a tres adolescentes, manipulaban un arma de fuego, concretamente una escopeta marca Winchester, calibre 16, que se disparó accidentalmente cuando uno de los muchachos la tomó en sus manos.
