Rafael Darío Briceño Casanova, de 29 años, trabajaba como chofer particular, solía cargar verduras y hortalizas para despachar a mercados mayoristas en Barquisimeto, Valencia, Maracay y Caracas.
El domingo llegó de viaje, estacionó el camión en su residencia, en la Mesa de Esnujaque, municipio Urdaneta y avisó que saldría, iría hasta Valera. Antes de que se fuera su madre le comentó que le provocaba una hamburguesa para cenar, él ofreció llevarla para que comiera lo que gustase, pero ir de parrillera en la moto por la noche no la convenció, así que lo bendijo y se despidió de él, sería la última vez.
La muerte lo esperaba en la ciudad de las Siete Colinas. Cuando iba por la entrada de San Luis, Valera, se detuvo en el semáforo para dar la vuelta, al parecer para retornar, y entonces chocó contra una camioneta Fortaleza, Ford, color blanco y en el impacto perdió la vida a consecuencia de los severos traumatismos que sufrió.
El equipo de rescate de los bomberos asistió pero hallaron a la víctima sin signos vitales, esperaron que la comisión de la Policía Nacional Bolivariana inspeccionara la escena y los vehículos involucrados para levantar el cadáver, remitido al Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf).
Mientras esclarecen las causas del siniestro y la responsabilidad de los involucrados, el conductor de la camioneta permanece detenido, a la orden del Ministerio Público. Mientras la familia Briceño Casanova gestiona los trámites funerarios para dar cristiana sepultura a Rafael Darío. Sus restos serán velados en la Mesa de Esnujaque y el sepelio se efectuará en el cementerio municipal.
Confusión
La familia asegura que era tarde para Rafael Darío, lo esperaban en casa, era extraño que a medianoche aún no llegara. La vía rápida era por la carretera Valera – Timotes, desconocen por qué iría hacia el Eje Vial si se disponía a regresar, sólo saben que se cruzó con la muerte.