Mi aplauso a la Academia de Mérida por prestigiarse enalteciéndose al incorporar a su cuerpo al profesor Francisco González Cruz, quién es poseedor de un ancho, alto y sólido currículum académico (fundador y rector emérito de la Universidad Valle del Momboy de Trujillo, promotor y diseñador del Instituto Tecnológico del Estado Trujillo, hoy Universidad Tecnológica e Individuo de Número del Centro de Historia de Trujillo), estudioso con significativa obra de investigación escrita sobre las realidades y posibilidades de desarrollo del estado Trujillo, autor y ejecutor de proyectos de desarrollo para la agricultura de los valles altos trujillanos, trabajador incansable por la promoción y defensa de la cultura regional trujillana, experto en la propuesta de la lugarización social, económica y cultural como modo de preservación de la identidad de los pueblos para una participación sin enajenación en el inevitable proceso de globalización de nuestro tiempo con fortalecimiento del capital social y el más decidido y participativo de los venezolanos en la causa de beatificación del doctor José Gregorio Hernández, y ahora en el de su santificación.